La sala para pacientes con coronavirus habilitada en el hospital de niños Mario Ortiz quedó saturada. El ambiente tiene capacidad para ocho pacientes, pero allí ya hay diez internados, incluyendo niños que además tienen otras enfermedades de base.
Ante esta situación, urge la contratación de al menos 50 profesionales para hacer frente a la emergencia sanitaria por el coronavirus.
“Ha colapsado. Tenemos dos pacientes que ya no son para un hospital de tercer nivel, hay que mandarlos a otro centro hospitalario porque concluyó su problema. Pero el Sedes no escucha lo que pedimos. Si nos llega un paciente, vamos a tener que rechazarlo porque no tenemos espacio”, manifestó el jefe de la sala Marcelo Terán, en contacto telefónico con EL DEBER.
El especialista pide con preocupación la atención de las autoridades a su demanda. Para hacer frente a la peor etapa de la epidemia que se avecina, considera que se requiere al menos 50 profesionales, entre médicos y enfermeras, lo que permitiría habilitar nuevas salas.
“Personal de salud, médicos y enfermeras, urgente. Por lo menos 50 personas para manejar el pico fuerte que habrá en las próximas semanas”, pidió Terán.
En medio de esta crisis también expone el drama de los profesionales en salud que corren el riesgo de contraer el virus y dejar de ayudar a los pacientes. “Los médicos somos humanos, no somos de piedra, también nos enfermamos. Se contaminarán y van a tener que ser dados de baja. Con qué reemplazaremos a ese personal”, cuestionó. El Deber