7,3 millones eligen el futuro de Bolivia

7.332.925 de bolivianos decidirán el futuro del país en unas elecciones cruciales e históricas, después de los fallidos comicios de 2019, que fueron anulados debido al   fraude. Esta justa electoral se da en medio de una crisis multidimensional, agudizada por la pandemia de la Covid-19.

El exministro Luis Arce, el expresidente Carlos Mesa, el excívico Luis Fernando Camacho, el médico Chi Hyun Chung y el cooperativista minero Feliciano Mamani pugnan por la silla presidencial.

Los bolivianos también están llamados a definir la composición parlamentaria. De las urnas saldrán elegidos 36 senadores, 63 diputados uninominales, 60 diputados plurinominales, siete diputados especiales y nueve representantes ante organismos parlamentarios supraestatales.

Del total de electores, 7.031.294 están habilitados para votar a nivel nacional y 301.631  en el exterior. Fuera de las fronteras, los bolivianos podrán votar en al menos 29 países. Argentina concentra la mayor cantidad de votantes connacionales (142.568) y de recintos electorales (113, de 194 establecidos en el exterior).

El presupuesto de estas justas electorales es de 215 millones de bolivianos, 12% menos que el dinero que se gastó en los comicios fallidos de 2019.

La elección de este domingo es decisiva e histórica. La del 20 de octubre del año pasado fue la primera en ser anulada desde 1982, cuando el país retornó a la senda de la democracia.

Los comicios de este domingo, según los expertos, marcarán un punto de inflexión respecto al poder y el peso de las organizaciones políticas. Se avizora, según las encuestas, que ninguna fuerza tendrá la hegemonía que detentó el partido azul durante casi 14 años, por lo que se espera que la  negociación y el consenso ganen protagonismo entre las fuerzas que vayan a conformar el nuevo sistema de frentes políticos.

Bolivia asiste a las urnas este domingo con un remozado Tribunal Supremo Electoral (TSE). Ese organismo fue renovado a través del consenso entre las fuerzas políticas, durante el proceso de pacificación facilitado por la Iglesia, la Unión Europea y NNUU.

Medidas de seguridad 

El Órgano Electoral lleva adelante estas elecciones con un padrón saneado con base en tres dimensiones: la inclusión de nuevos votantes, la actualización de domicilios de quienes retornaron al país por la pandemia, y la depuración de fallecidos y registros dobles, labor que se hizo con el cruce de información del Servicio de Registro Cívico, cementerios y el Servicio Nacional del Sistema de Reparto, entre otros.

Para garantizar la confiabilidad del padrón, el TSE habilitó los “Laboratorios de Integridad Electoral”, para que organizaciones políticas, sociales y la ciudadanía en general conozcan los pormenores de cómo se construye y funciona la base de datos más importante del proceso electoral.

El TSE también aplicó seis medidas de seguridad en las actas electorales para evitar estas sean cambiadas o adulteradas. Cada una de estas cuentan con código QR, código de barras, tinta invisible, patrón guilloché, microtexto y una cinta adhesiva transparente especial que se colocará luego de que los jurados llenen los datos del escrutinio.

Elecciones y coronavirus

El esperado proceso electoral, pospuesto en dos oportunidades debido a la pandemia (en Bolivia se registran más de 8.000 decesos y cerca de 140 mil contagios), fue organizado por el TSE contemplando 51 medidas sanitarias: siete generales y 44 específicas.

Las medidas generales son: el incremento de recintos, la ampliación por una hora del horario de la jornada de votación hasta las 17:00, la restricción de actividades comerciales en un radio de 100 metros alrededor del recinto y dos horarios para la votación, según el último dígito de la cédula (de  8:00 a 12:30 del 0 al 4 y de 12:30 a 17:00 de 5 a 9). Además, se dispuso sortear a jurados entre ciudadanos de 18 hasta 50 años, la implementación de “guías electorales”  y el uso obligatorio de barbijos.

El Órgano Electoral también decidió incluir en la maleta electoral insumos de bioseguridad y otros elementos para precautelar el cumplimiento del protocolo sanitario. Alcohol en gel, barbijos para los jurados, desinfectante en alcohol con atomizador, cotonetes y señalética de distanciamiento, son algunos de los nuevos ítems en la valija.

Bajo la mirada del mundo

Luego del fallido proceso electoral del 20 de octubre de 2019, anulado el 24 de noviembre por el fraude, Bolivia vive hoy una jornada histórica bajo la mirada del mundo.

Cuatro son las principales misiones de observación internacional que vigilarán  los comicios. La Organización de Estados Americanos (OEA), la Unión Europea (UE), el Centro Carter y la Unión Interamericana de Organismos Electorales (Uniore) se desplazarán en todo el territorio boliviano.  En los días posteriores presentarán un informe sobre el proceso electoral.

También estarán presentes las misiones de la Organización de las Naciones Unidas y de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina, entre  otras delegaciones. Agencias