Carlos Alberto Sánchez Ramírez, mejor conocido como Charlie Zaa, es un cantante reconocido por sus boleros románticos, pero ahora saltó a la palestra por estar en la mira de la Justicia colombiana por presuntos nexos con el paramilitarismo.
El Tribunal ordenó medidas cautelares sobre cinco de sus propiedades, incluida la discoteca Solaris y el centro comercial Oasis, cuyo valor asciende a unos 25.000 millones de pesos. La Fiscalía lo solicitó como parte de un proceso de extinción de dominio que investiga si los bienes fueron adquiridos con dinero de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) para luego ejecutar un lavado de dinero como presunto testaferro.
