Activistas de “Una mano, una patita”, lamentan que hombre acusado de zoofilia no pueda ser procesado, luego de que la perrita que habría violado perdió la vida.
“Si bien no hemos seguido los protocolos correspondientes que deberían ser, la perrita está ya enterrada, pero sabemos y estamos conscientes que si ha sido la violación, pero tenemos que tener más pruebas, entre ellos se tildan, entre ellos se gritan, no ha sido él, que había el cojito que si los violaba, todos sabemos es un silencio a gritos”, aseguró Vivían Sánchez, voluntaria.
La activista asegura que hay testigos de las violaciones que no denuncian por miedo, “hay varios testigos que muchos, por el temor a la reacción de esta gente, también temen de poder involucrarse”, agregó.
Sánchez pidió a las autoridades asumir acciones reales sobre las personas en situación de calle para que puedan ser rehabilitados.