Wendy, una adolescente de 15 años, desapareció hace una semana. En la carta que dejó a su madre le hace conocer que se fue porque le prometieron un trabajo “cama adentro”. Hasta el momento se desconoce su paradero y tampoco responde su celular, por lo que las autoridades presumen que fue víctima de trata y tráfico.
“Papi y mami, los quiero mucho, no se preocupen por mí, estaré bien. Me iré a trabajar cama adentro, quiero tener mis cosas pero lejos, y si piensan que me fui a Santa Cruz, no. Les haré videollamada cada día y a ti, mami, cada vez que recoja mi plata, te mandaré 500 bolivianos o más para tu banco”, detalla la nota que dejó la menor.