Son estudiantes, su información está disponible e incluso llega a ser ofrecida para conversaciones privadas y likes en sus videos, volviéndolos vulnerables a organizaciones que se dedican a la trata y tráfico de personas.
Adolescentes entre los 13 a 17 años, manejan cuentas sin restricciones en TikTok, donde se encuentran expuestos a todo tipo de riesgos y no tienen forma de saber con quién hablan realmente.
Las redes sociales pueden convertirse en un riesgo si se las usa de forma irrestricta y sin control, su papel en nuestras vidas tomó mayor fuerza con la llegada de la pandemia.
La directora del Servicio Departamental de Gestión Social (Sedeges), Mariela Arze, asegura que las redes de trata y tráfico de personas ahora emplean la tecnología para captar a sus víctimas.
“Ahora la nueva modalidad de trata y tráfico de personas radica en la tecnología, y eso ha sido precisamente impulsado por el factor de la pandemia, donde nos hemos visto enclaustrados en nuestros domicilios y hemos tenido que acceder a las redes sociales hasta incluso para tener contacto, con las personas, nuestro entorno, amistades, familiares”, explicó.
Los cambios a una mayor presencia en las redes y la virtualidad tomaron desprevenidos a todos, en especial a los estudiantes y que esto es aprovechado por los tratantes.
“Lamentablemente, nuestros adolescentes, nuestros niños, no han estado preparados para poder ingresar de golpe a esta modalidad, donde obviamente muchas personas malintencionadas han buscado esta modalidad de captar víctimas a través de las redes sociales, a través incluso de los juegos en línea que ahora también se han podido determinar que se han captado víctimas de trata y tráfico de personas”, agregó la autoridad.
¿USTED SABE QUE HACEN SUS HIJOS EN TIKTOK?
El TikTok fue creado como una red social que permite grabar, editar y compartir videos cortos. En nuestro país se volvió popular principalmente entre los adolescentes.
Gran parte de los adolescentes en nuestro país usa sus cuentas donde publican videos y fotografías. Este material contiene en muchos casos su información personal en “videos de presentación”, donde se expone su identidad, su edad, gustos, ubicación y en muchos casos sus cuerpos.
Lo último se refleja en la mayoría de los videos en la red social con bailes, retos y tendencias. Sin embargo, principalmente las adolescentes exponen sus cuerpos sin considerar a quienes pueden llegar estos videos. En muchos de estos incluso a ofrecer sus números telefónicos para conversar por WhatsApp, con el fin de tener más seguidores.
Y son estos videos principalmente los que tienen mayor alcance en la red, tienen comentarios y muestran un mayor contacto con personas desconocidas para las menores.
Como ejemplo, en un video donde una adolescente realiza un baile, fue visto por 1500 personas, de ese total tuvo 70 comentarios, dentro de estos lo primero que hacen es preguntar de donde es, cuál es su perfil en Instagram, “halagos” de perfiles de hombres en su mayoría mayores, señalando que es hermosa, de los 70 comentarios es difícil saber si llego a tener una conversación privada con alguien y para la menor sería aún más difícil saber si esa persona es real.
Aunque un perfil en una red social, muestre una fotografía, una identidad no se puede estar seguro de quien se trate, “no saben, estas personas inescrupulosas utilizan diferentes medios para poder ocultar su identidad, ya sea en las redes sociales, al momento de captar a los menores de edad y esa es la problemática”, explica el Jefe de la División de Cibercrimen de la Felcc, Capitán Rubén Darío Blanco.
Blanco señala que hay deficiencias en los límites que deberían tener estas redes para los adolescentes, el cual asegura debería partir desde estas empresas, “cualquier menor de edad o cualquier persona que tenga simplemente un correo electrónico, ya sea ficticio o un número telefónico, cualquiera puede apertura cualquier red social, entonces esto nos complica un poco, ya que deja prácticamente a la población un poco indefensa en este sentido”, agrega.
¿CÓMO EVITAR QUE SU HIJO SEA BLANCO DE UNA RED DE TRATA?
La principal recomendación de ambas autoridades es que los padres se acerquen a sus hijos y verifiquen el tipo de actividad que realizan en sus redes.
Pero, ¿los padres saben cómo hacerlo?, la Directora del Sedeges explica que se hacen talleres para capacitar a los padres y en estos talleres ven que muchos de ellos desconocen cómo funcionan las redes sociales y como controlar el acceso que tienen sus hijos.
“Lamentablemente, desconocen, gran parte desconoce cómo se tiene que controlar, incluso hay mecanismos de control que uno puede insertar en los teléfonos móviles, pero desconocen plenamente”, señaló Mariela Arze.
Por su parte, el Jefe de la División de Cibercrimen de la Felcc, brinda recomendaciones a los padres, que pueden hacer la diferencia en casos de desaparecidos o víctimas de trata y tráfico.
“Mi primera recomendación, incluso yo lo aplico en el hogar, es que si son menores de edad los chips, los teléfonos para empezar tienen que estar registrados a nombre de los papas”, señala el Capitán Rubén Darío Blanco.
Lo siguiente es que los padres conozcan el usuario y contraseña del correo electrónico que los menores usan para abrir una red social. “Al momento de aperturar un Facebook por ejemplo, debería el padre tener el usuario y la contraseña mínimamente, y tener una periodicidad de control de los padres”, agrega.
La autoridad señala además que este control que se realiza no debe ser brusco, ni debe hacer sentir amenazados a los adolescentes.
“Tal vez no bruscamente, averiguar muy de frente a los menores de edad, entonces tener ese cuidado a fin de que el menor de edad tampoco se sienta un poco retraído, un poco amenazado por el tema de los padres y de esta forma tener un control”, señala.
Finalmente, la Directora del Sedeges, añadió que se trabaja en realizar mayores capacitaciones a los padres para que más conozcan como poder controlar el acceso de los menores a las redes.
“Tenemos que seguir trabajando y fortaleciendo a través de estos talleres a los padres de familia y obviamente los padres tienen que preocuparse porque la cantidad de casos que se están presentando a nivel nacional de trata y tráfico de personas, también los padres tienen que preocuparse por tener mayor información para poder cuidar a sus hijos”, señalo.
Ante este complicado panorama, los padres deben conversar con sus hijos y explicarles que esa información puede llegar a salvarlos de los riesgos a los que están expuestos a diario, por lo que la comunicación con los adolescentes es la base principal de la prevención.