EL CAMOTE
Cada vez que te comes un camote, le estás haciendo un favor a todo tu cuerpo, incluyendo tu rostro. «El camote es un alimento increíblemente saludable, lleno de caroteno (ingrediente clave para una piel radiante), vitamina C y B6, biotina, fibra y un fuerte antioxidante», También es una buena fuente de cobre, el cual ayuda a que tu cuerpo produzca colágeno, haciendo que estos tubérculos sean un sistema más barato y menos doloroso que las inyecciones faciales.
LAS BAYAS
La antocianina, el antioxidante que da a muchas bayas sus llamativos colores, también protege tu piel de los rayos UV. «Las fresas también son una buena fuente de sílice, un mineral esencial para una piel y un tejido conectivo sanos», dice Middleberg. Si quieres algo dulce y saludable, prueba estas paletas de yogurt de bayas rojas, blancas y azules (o uno de estos deliciosos postres de bayas de verano si quieres otro gusto más).
LOS FRIJOLES
«Los frijoles, en general, son increíbles», dice Gans. Contienen mucha proteína, fibra y vitaminas B, todas buenas para el cuerpo. Las proteínas y la fibra ayudan a mantener sano el corazón, y las vitaminas B, según Gans, reducen la inflamación de la piel. Aunque cada tipo de frijol tiene un nivel de nutrientes específico, Gans aconseja que comas simplemente los que más te gusten. «Pero», dice, «no estoy diciendo que coman frijoles refritos», que pueden contener altos niveles de grasa. Mejor cómelos al natural o con huevos rancheros.
LA AVENA
La avena está repleta de una gran cantidad de nutrientes, incluyendo vitaminas del complejo B, fibra y proteína. Esas vitaminas B son maravillosas para la piel, el cabello y las uñas, pero también actúan profundamente para nutrir el sistema nervioso. La fibra ayuda al buen funcionamiento del sistema digestivo y la proteína mantiene tus niveles de energía altos. Pero, agrega Gans, «no estoy sugiriendo la avena instantánea endulzada con azúcar». En lugar de eso, prueba esta avena como un superalimento envasado durante la noche.
LA LECHE
Nuestro cuerpo necesita vitamina D para que podamos absorber el calcio y mantener una buena salud ósea y, usualmente, la obtenemos del sol. Además, según un estudio británico de 2007, los niveles más altos de vitamina D también pueden mejorar la salud del ADN en nuestras células, retardando el proceso de envejecimiento y protegiéndonos contra las enfermedades relacionadas con la edad.
LAS SARDINAS
Agregar más omega 3 a tu dieta puede retrasar el deterioro natural de tu cerebro a medida que envejece, según un estudio realizado en enero de 2014.
Busca las anchoas europeas del Adriático o las sardinas del Pacífico para obtener la mayor cantidad de omega 3 y la menor cantidad de mercurio posible, además, los pequeños huesos en las sardinas son otra gran fuente de vitamina D. ¿Te da miedo probar las anchoas? Empieza poco a poco con un dip «Diosa Verde».
EL CACAO
No todos los chocolates son saludables, pero un buen tipo de chocolate puede en realidad mejorar tu salud. «El cacao puro», dice Middleberg, «es extremadamente saludable». En un estudio de los indios Kuna en las costas de Panamá, los científicos atribuyeron el bajo riesgo de hipertensión y de enfermedades cardiovasculares de la población, a pesar de su peso y consumo de sal, a su alta ingesta de cacao, que es 10 veces mayor al de un estadounidense normal. Las grasas saludables como el aceite de oliva y las nueces reducen el riesgo de un ataque cardíaco, derrame cerebral y muerte por enfermedad cardiovascular.
LAS ESPINACAS
Parece que no hay mucho que la espinaca no pueda hacer. Esas pequeñas hojas están llenas de hierro, vitamina K y nutrientes como la luteína y la zeaxantina. El hierro aumentará tu energía y fortalecerá tus músculos, mientras que la vitamina K ayudará a la densidad de tus huesos y prevendrá posibles fracturas y osteoporosis.
VINO TINTO
Buenas noticias para los amantes del vino tinto: una copa en la noche puede mejorar tu salud cardiovascular. Otros estudios han encontrado que el resveratrol antioxidante que contiene la piel de las uvas puede prevenir el desarrollo de tumores, así como ayudar a que tu cuerpo cree células nerviosas que pueden ayudar a tratar enfermedades neurológicas como el Alzheimer y el Parkinson.