Según una investigación realizada por la Sociedad Americana del Cáncer, el cáncer colorrectal es el tercer tipo de cáncer más común en los Estados Unidos, tanto para hombres como para mujeres. Los síntomas típicos de esta enfermedad incluyen sangrado rectal, sangre en las heces, calambres o dolores abdominales, cambios en la forma de las heces, cambios en los hábitos intestinales, anemia y pérdida de peso.
¿QUÉ ES EL CÁNCER?
El cáncer colorrectal también se conoce como cáncer de colon, cáncer intestinal o cáncer rectal. Normalmente los médicos lo identifican por el lugar donde aparece el tumor. Los tumores y pólipos, cuando no se extirpan al inicio, pueden crecer con el tiempo y volverse cancerosos. También pueden propagarse a las otras capas del intestino grueso, lo que hace que la enfermedad sea más peligrosa.
FACTORES DE RIESGO
Algunos elementos de riesgo del cáncer de colon incluyen factores modificables, hereditarios y médicos, tales como: Antecedentes familiares o personales de cáncer colorrectal, Alto consumo de carne roja o procesada, Fumar por largo tiempo, Uso a largo plazo de antiinflamatorios no esteroideos, Bajo consumo de calcio, Bajo consumo de frutas y verduras, Bajo consumo de fibra integral, Consumo de alcohol de moderado a intenso, Sedentarismo y Antecedentes personales de enfermedad inflamatoria intestinal crónica, Obesidad y Diabetes tipo 2.
MEJORES ALIMENTOS
Tu colon necesita la cantidad correcta de ácidos grasos omega 3, vitamina D, calcio y flavonoides para evitar que los tumores crezcan. La fibra dietética también es esencial, ya que promueve la evacuación intestinal periódica y ayuda a limitar la acumulación de bacterias. A continuación, se muestran algunos grupos de alimentos que pueden ayudarte a prevenir el inicio del cáncer de colon.
PESCADO
El pescado fresco alto en ácidos grasos omega-3 puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. De hecho, un equipo de investigación de la Universidad de Vanderbilt descubrió que las mujeres que comen tres porciones de pescado por semana redujeron su riesgo de desarrollar pólipos de colon en alrededor del 33 por ciento. Sus mejores selecciones serían salmón horneado o ahumado, atún y sardinas, ya que también son ricos en vitamina D y calcio.
FRUTAS
Por lo general, las frutas son ricas en antioxidantes, fibra y fitoquímicos específicos de cada especie, que pueden ayudar a protegerte de los problemas digestivos. Las manzanas, moras, plátanos, arándanos, naranjas, peras y frambuesas son algunas de las mejores fuentes de fibra.
VERDURAS
Para la salud general, la regla básica es llenar dos tercios de tu plato con alimentos a base de plantas, ya que son ricos en fibra, vitaminas, minerales y fitoquímicos. Sin embargo, para reducir tu riesgo de presentar diabetes tipo 2, que es otro factor que puede conducir al cáncer de colon, la Asociación Americana de Diabetes sugiere que des preferencia a las verduras no amiláceas.
Trata de comer al menos 3 a 5 porciones de verduras no amiláceas al día, incluyendo lechuga, col rizada, pepinos, alcachofas, brócoli, col, zanahorias, coliflor, apio, quimbombó y espinacas.
CARNE BLANCA
La proteína es indispensable para el desarrollo muscular, el crecimiento de los tejidos y más. Y como necesitas limitar tu consumo de carne roja, tus alternativas más saludables serían pollo o pavo sin piel. Los huevos también son una buena opción.
GRANOS INTEGRALES
Los granos integrales son otro grupo de alimentos con mucha fibra que puedes combinar perfectamente con pescado, huevos y carne blanca. Tus opciones más saludables serían arroz integral, cebada, avena y quinoa.
FRUTOS SECOS
Comer al menos dos porciones de una onza de frutos secos a la semana puede ayudar a mantener bajos tus niveles de azúcar e insulina en sangre, reduciendo tu riesgo de presentar diabetes tipo 2. Dado que también cuentan con ácidos grasos saludables, fibra y flavonoides, los frutos secos también pueden ayudar a disminuir tus probabilidades de tener cáncer de colon.
FRIJOLES Y LEGUMBRES
La soya, las lentejas, los guisantes, los frijoles pintos, los frijoles negros y los frijoles rojos son una excelente fuente de proteína, fibra, vitamina B y vitamina E. Además de los beneficios y la protección que proporcionan a tu colon, los frijoles y las legumbres también pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol y azúcar en sangre. Agencias