Análisis médicos para hombres entre los 40 y 65 años

A medida que envejecemos, el cuerpo se vuelve más susceptible a las enfermedades crónicas. En especial, si tenemos antecedentes familiares de ciertas patologías. Para evitar complicaciones a largo plazo, es necesario realizar análisis médicos periódicos que nos permitan detectar problemas de salud en etapas tempranas.
A partir de los 50 años, el riesgo de sufrir enfermedades aumenta. Por eso, te invitamos que conozcas cuáles son los análisis médicos que deberías realizarte entre los 40 y los 65 años.
CRIBADO DE CÁNCER DE COLON
El análisis más recomendado por expertos para la detección del cáncer de colon es la colonoscopia, una prueba en la que se examina el colon con un tubo flexible con una cámara. También existen otras opciones, como la prueba de sangre oculta en heces y la rectosigmoidoscopia, pero su sensibilidad es menor.
El cáncer de colon es la segunda causa principal de muertes por cáncer en los Estados Unidos. Por lo tanto, su detección temprana es fundamental para iniciar un abordaje que sea efectivo. Entre los 50 y los 75 años se debe realizar un chequeo de este tipo, aunque no haya síntomas.
PESO CORPORAL
El sobrepeso y la obesidad pueden aumentar de manera significativa el riesgo de padecer enfermedades crónicas. Según los estudios científicos, el aumento de peso se asocia con diabetes, cardiopatías, apnea del sueño y algunos tipos de cáncer.
Es necesario que estés al pendiente de tu peso junto a tu médico y logres contrarrestar este factor de riesgo con una dieta saludable y actividad física regular. Son medidas sencillas que podrían cambiar tu calidad de vida.

MEDICIÓN DE LA PRESIÓN
Esta es una prueba rápida y sencilla que mide la fuerza que la sangre ejerce sobre las paredes de las arterias, a medida que fluye a través del cuerpo. Para realizar la medición se utiliza un dispositivo llamado esfigmomanómetro, que consta de un brazalete inflable que se coloca alrededor del brazo y un manómetro que mide la presión.
Una medición de presión sanguínea es simple, económica y rápida. Por lo general, puede ser concretada en el consultorio con tu médico de confianza.
ANÁLISIS DE COLESTEROL
Un análisis de colesterol se realiza en el marco de un examen de sangre. Se mide la cantidad de colesterol y de triglicéridos. Los primeros se dividen en colesterol total, colesterol HDL o bueno y colesterol LDL o malo.
Si los niveles de colesterol total o LDL resultan elevados, tu médico puede recomendarte cambios en la dieta y el estilo de vida para evitar enfermedades cardiovasculares o hepáticas.
ANÁLISIS DE AZÚCAR EN SANGRE
La prueba de azúcar en sangre se efectúa para detectar diabetes o prediabetes. También detecta hipoglucemias, una condición en la que los niveles de azúcar en sangre son anormalmente bajos. Es habitual que se realice en ayunas. La glucemia se debe medir cada 3 años a partir de los 45.
REVISIONES OFTALMOLÓGICAS
Es importante un examen oftalmológico completo alrededor de los 40 años. Sin embargo, si se tienen problemas de visión previos o antecedentes familiares de glaucoma, por ejemplo, se recomienda la realización de los exámenes antes.
EXAMEN FÍSICO
Es importante que asistas a citas regulares con tu médico de confianza para un examen físico. Esto te ayudará a detectar enfermedades y evaluar riesgos de problemas futuros. La revisión general abarca desde lo psicológico hasta el repaso de hábitos alimentarios y exámenes de la piel. Todo, con la finalidad de evaluar la salud general.
ANÁLISIS MÉDICOS
Con el paso de los años, el cuerpo experimenta cambios que aumentan el riesgo de sufrir enfermedades crónicas. A partir de los 50, es común volverse más vulnerable a ciertas enfermedades, como comenta el National Council of Aging. Esto se debe a una combinación de factores.
Es por eso que es importante cuidar tu salud a medida que pasan los años. Esto incluye una dieta saludable, hacer ejercicio, evitar el consumo de alcohol y, por supuesto, hacerte los análisis médicos recomendados.
Los exámenes preventivos son una herramienta valiosa para detectar problemas antes de que se conviertan en enfermedades graves y debilitantes. Mantener una relación cercana con tu médico te ayudará a tomar decisiones informadas.