Georgio Terrazas, promotor del revocatorio contra alcalde Manfred Reyes Villa, denunció la tarde de este miércoles que una persona adulta mayor lo agredió en inmediaciones de Plaza Principal 14 de Septiembre, en el lugar donde tenía ubicados los libros notariados que las personas firmaron a favor del revocatorio de la autoridad edil.
Terrazas inició con la recolección de firmas para el revocatorio contra Manfred Reyes Villa valiéndose de una mesa, una silla, un baner y el libro para las firmas.
Cuando finalizaba la tarde, Una señora de la tercera edad destruyó uno de los libros que contenían las firmas recolectadas. En un video que circula en redes sociales que documenta la agresión, se puede observar a una mujer de la tercera edad que destruye el documento con sus manos, seguidamente se la oye decir a gritos: “No joden más, no joden más”. El hombre la acusa de ser “gente del alcalde”, la respuesta de la mujer es negativa y afirma que es una ‘persona mayor’. Posteriormente procede a envestir a Terrazas para quitarle el celular pero no lo consigue.
«Ella solita se ha alzado el libro y mire como ratón se lo ha comido. Mire como ha quedado el libro, hoy día hemos empezado a firmar. Mire las partidas que ya estaban llenas. Son personas antidemocráticas y que no dejan ejercer un derecho que se llama constitucional», explicó Milton Mamani, politólogo que hace seguimiento a este caso desde tiempo atrás.
La anciana agresora procede a alejarse del lugar no sin antes proferir insultos y ejecutar actos burlescos con su cuerpo.
El promotor, junto a Mamani, solicitaron a las autoridades nacionales tomar cartas en el asunto, puesto que este tipo de agresiones están reguladas por la ley 026 del Régimen Electoral, donde se penaliza la ‘Obstaculización de procesos electorales’, con penas de 2 años para quien obstaculice, obstruya o impida la realización o desarrollo de procesos electorales, o revocatorias de mandato.
Según información extraoficial, la agresora fue identificada como alguien que desde siempre presenta este tipo de actitudes violentas. Fue reconocida como extrabajadora en la Morgue del hospital Viedma y como una de las acérrimas seguidoras del alcalde. No se registró el pronunciamiento de autoridades en torno a este acto que atenta contra la misma democracia y libertad de expresión de la gente.