Argentina es campeón vigente de la Copa América, campeón vigente de la Finalísima y campeón vigente de la Copa del Mundo. Le ganó la final a Brasil en la última edición del certamen americano, venció a Italia en el duelo de campeones continentales y superó a Francia en la mejor final de todos los mundiales.
El domingo 14 de julio podrá defender todas estas coronas en una nueva final de Copa América: luego de la victoria 2 a 0 ante Canadá en semifinales enfrentará al ganador de Colombia y Uruguay, un duelo que se jugará a las 21 horas en el Hard Rock Stadium de Miami, Florida, donde Argentina ya venció dos a cero a Perú por la última fecha de la zona de grupos.
Se jugará en la ciudad donde Messi hace de local, cantará Shakira en la previa, tendrá la final de la Eurocopa como antesala de lujo, habrá 65 mil personas en el estadio, contará con alargue en caso de empate en los primeros noventa minutos, será la despedida de Ángel Di María con la camiseta argentina, podrá quedarse con los veinte millones de dólares que recibirá el ganador y aparecerá una nueva oportunidad para enaltecer la era de Lionel Scaloni al frente del seleccionado nacional. Argentina, a su vez, estaría a una victoria de desprenderse en la soledad de la cima de países con más copas continentales: actualmente comparte el cetro con Uruguay, ambas con quince títulos.
Habrán pasado tres años y cuatro días de un umbral histórico: el gol de Di María en el Maracaná en la edición pasada de la Copa América que tendría que haberse jugado en 2020 y se postergó por el covid-18, marcó el fin de la sequía, del trauma, de la mufa. Después de que se terminaran los 28 años sin festejos, la Selección ganó una final intercontinental ante Italia y el Mundial en Qatar para alzar la tercera estrella. Este 14 de julio podrá repetir la consagración y respaldar el primer puesto en el ranking de la FIFA, que mantiene desde el primer trimestre de 2023.
Será una final más en la historia. En la Copa América de 1993 comenzó a jugarse con el formato actual: fue la primera vez que se disputó una final, con los diez representantes de la Conmebol, dos invitados y tres grupos de cuatro equipos cada uno. Argentina venció en la final por 2 a 1 a México con un doblete de Gabriel Batistuta. Era su triunfo número catorce en la competición. Luego disputó cuatro finales más: dos contra Brasil y dos contra Chile. En tres de esos partidos definitorios, el partido se definió por penales. Argentina no ganó ninguno: caída con Brasil en 2004 luego de igualar en dos -goles de Cristian González, César Delgado, Luisao y Adriano-, derrotas consecutivas con Chile en 2015 y 2016 luego de empatar ambos encuentros sin goles. El juego restante se celebró en Venezuela en 2007 y la Albiceleste cayó por tres goles ante el Scratch con tantos de Julio Baptista, Roberto Ayala en contra y Dani Alves.
La racha adversa se cortó en la final de Brasil 2021. De las doce finales que se jugaron desde que se compite bajo este nuevo sistema, Argentina jugó la mitad: ganó dos y perdió cuatro. Además de quince títulos, la Albiceleste tiene catorce subcampeonatos, muchos más que los uruguayos, que presume de mayor efectividad en los partidos determinantes, ya que solo tiene seis subcampeonatos. El podio de los ganadores lo cierra Brasil con nueve consagraciones.
En caso de ganar el domingo la final del torneo de selecciones más antiguo de la historia, Argentina podría alcanzar su cuarto bicampeonato y ratificar su medalla de más títulos consecutivos posee: ya los ganó en 1927-1929, en 1957-1959 y en 1991-1993. Es, a su vez, la única selección que logró coronarse como tricampeona de la competencia al levantar el trofeo en 1945, 1946 y 1947. El rival de la Scaloneta se conocerá la noche del miércoles 10 de junio cuando Uruguay y Colombia se enfrenten en la otra semifinal de la Copa América.