«La otra vez tuvimos un impasse, pero ahora le regalo (al alcalde de Oruro Saúl Aguilar) un beso de negro para que ya no nos peleemos», dijo ayer Arias mientras sacaba de una caja las golosinas y las repartía a los funcionarios.
Dispuesto a realizar las paces a su estilo, el ministro de Obras Públicas Iván Arias pidió disculpas al alcalde de Oruro Saúl Aguilar y otras autoridades de ese departamento después de un impasse ocurrido hace unos días, de una manera particular: obsequiando chocolates.
El “Negro Arias”, como lo conocen en el entorno político, regaló a las autoridades ediles nada menos que los chocolates conocidos como “besos de negro”, luego de la entrega de insumos médicos y pruebas para la detección del coronavirus de Proteína C Reactiva (PCR) para que ya no exista conflicto entre el Gobierno y el nivel municipal del departamento.
“La otra vez tuvimos un impasse, pero ahora le regalo (al alcalde de Oruro Saúl Aguilar) un beso de negro para que ya no nos peleemos”, dijo ayer Arias mientras sacaba de una caja las golosinas y las repartía a los funcionarios. Agencias