El presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, aseguró que no existe «apuro» por retomar la competencia en las copas Libertadores y Sudamericana, que tendrán un «calendario flexible», posibilitando jugar «un 30 de diciembre o en enero».
Domínguez insistió además en la duda que gira en torno a la realización de la final única 2020 en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, que es una de las ciudades más golpeadas por el coronavirus en Brasil.
«Es todo un tema, hay que evaluar como sigue el virus y su evolución. Nuestro deseo sigue siendo el mismo, de jugar en Sudamérica, pero estamos atados a eso», remarcó en La oral deportiva, ante la chance de volver a llevar la final a Europa, como ocurrió en 2018, por otra razón, con River-Boca.
«No hay apuro para retomar la competición. Si se tiene que jugar el 30 de diciembre, se jugará, y en enero también. El calendario será flexible y lo primordial siempre será la salud. Junio, julio y agosto será difícil», declaró.
En ese sentido, agregó: «No tengo fechas tentativas. Claro que me gustaría, pero sabemos que el virus está en plena evolución. Estamos trabajando para volver y se va a terminar tanto la Libertadores como la Sudamericana y se va a comenzar con las Eliminatorias del Mundial, volviendo a la vida normal pero siempre respetando el ciclo de los virus».