El saltador británico de trampolín Tom Daley, reconocido activista de los derechos del colectivo LGTB, volvió a reivindicar la causa gay al colgarse el oro olímpico en el salto de 10 metros sincronizado, junto con Matty Lee.
El joven prodigio del salto, que participó con 14 años en los Juegos de Pekín de 2008 y ésta es su cuarta cita tras las de Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, declaró: «Estoy increíblemente orgulloso de decir que soy un hombre gay y que también soy un campeón olímpico.
Me siento empoderado porque cuando era más joven pensaba que nunca podría conseguir nada por ser quien yo era».