Un reportaje emitido por un medio de comunicación del Perú, muestra cómo se utilizan pistas clandestinas en medio de la selva donde operan estas aeronaves cuyo origen atribuyen a nuestro país. Un reportaje emitido por Latina Televisión del Perú muestra como avionetas, presumiblemente bolivianas, usan pistas clandestinas en la selva, y que son utilizadas para llevar sustancias controladas.
En el reporte se muestra como el tráfico ilegal de sustancias se lleva adelante en las regiones de Pasco, Huánuco y Ucayali, pues en estas localidades hay varias pistas clandestinas en donde aterrizan avionetas con droga. Si bien los agentes de la Dirección Antidrogas destruyen estas pistas, los pobladores de la zona las vuelven a construir.
Asimismo, en el informe se muestra que en medio de la selva peruana hay cultivos de cacao, sin embargo, eso solo es una ‘pantalla’ ya que detrás, e incluso en medio de ello, están las hojas de coca. Los efectivos antidrogas en Perú aseguran que las avionetas que aterrizan en la zona tienen matriculas bolivianas, por lo que utilizan a este país como zona de tránsito.
Sin control, reconstruidas en tiempo récord y a disposición de narcotraficantes bolivianos y brasileños que trabajan en alianza con clanes locales, las pistas clandestinas en Huánuco, Ucayali, Pasco y Junín han reconfigurado el negocio del narcotráfico en los últimos años.
Según datos de inteligencia de la Dirección Antidrogas de la Policía Nacional (Dirandro) citados este viernes por Hildebrandt en sus trece, los usuarios de estas narcopistas son fundamentalmente bandas bolivianas lideradas por dos presidiarios, y otras dos redes brasileñas extendidas en la región (el Primeiro Comando da Capital y el Comando Vermelho).
Estas organizaciones tienen su casa matriz en sus países de origen, pero transitan por el Perú para comprar mercancía ilícita en alianza con moradores locales o tras pagar a comunidades indígenas por el uso de las narcovías. La tercerización de los servicios los hace menos vulnerables, según la investigación difundida por el semanario. Las principales bandas bolivianas con tentáculos en el país, identificadas por Inteligencia policial, pertenecen a los clanes de Jesús Lima y de Marco Roca, ambos presos, pero a la cabeza del negocio en la región. En la nómina también aparecen las familias bolivianas Nacif Suárez, Majluf Antelo y Gómez Ortega. Infobae