Es difícil impartir educación virtual en el área rural a pesar de los esfuerzos que hagan los maestros. No todos los padres cuentan con un celular de última tecnología y tampoco es posible llegar a todos los estudiantes, porque la señal de internet se corta cada cierto tiempo, y a esto se suma que muchos padres de familia no cuentan con los recursos económicos para adquirir megas para que sus hijos se puedan conectar, comenta la profesora Reyna Ruiz Toledo, maestra de nivel primario de La Angostura, población ubicada a 60 kilómetros de la ciudad capital.
«Las clases virtuales nunca serán iguales a las clases presenciales, sobre todo en el nivel primario, ya que los niños necesitan bastante apoyo de sus profesores en esta etapa de la educación ; se necesita el contacto del profesor con el estudiante para ver lo que está haciendo y cómo lo está haciendo y apoyarlo», afirma Ruiz.
Ella apuesta por la clases presenciales y considera que implementando medidas de bioseguridad y con la fe puesta en Dios, es posible volver a las aulas.
Similar es el criterio expresado por la profesora Ángela León, maestra de nivel secundario en la comunidad Tres Cruces, perteneciente al municipio de Pailón.
Ella afirma que la pandemia por coronavirus ha golpeado muy fuerte a las familias en el aspecto económico, puesto que muchos padres de familia de sus estudiantes han perdido su fuente de trabajo, debido a que se han cerrado muchas industrias, por lo que no pueden acceder a comprar megas o contar con un aparato móvil que pueda tener conexión a WhatsApp, Zoom, u otras aplicaciones.
«Los padres de familia están buscando trabajos temporales o eventuales para alimentar a sus hijos; el factor económico es el principal problema», sostiene. Además, agrega, que la señal de internet es muy baja, es uno de los mayores problemas en el campo, ya que los chicos viven en zonas alejadas o dispersa de la comunidad.
En San Ignacio de Velasco enfrentan el mismo problema. Los estudiantes no cuentan con internet y aparatos telefónicos para tener acceso a la educación virtual. Es por ello que los maestros de dicha provincia volverán a clases el 20 de julio como lo ha previsto el Ministerio de Educación, para reiniciar el calendario educativo de la presente gestión.
Los docentes rurales de los municipios de San Miguel, y San Rafael de Velasco, determinaron reiniciar actividades educativas en la primera semana de agosto, pues la cuarentena nacional por la pandemia, se prevé que acabe el 31 de julio.
Sin embargo, hay maestros que, a pesar de los obstáculos están dispuestos a avanzar con la educación virtual, pero tomando en cuenta algunas realidades. Es el caso del profesor Zoilo Pérez Chavarría de Pailón. «A mi me gusta mucho la tecnología y de manera personal considero que es mejor hacer algo a no hacer nada, obviamente entendiendo las distintas realidades», expresa. Él enseña en un colegio de la zona urbana de Pailón, donde un 85% de sus alumnos tiene acceso a internet para pasar clases, por lo que cree que es posible continuar con las labores académicas de manera online, aunque reconoce que no es la misma situación en las comunidades rurales.
Recordemos que varios profesores del área rural llevan adelante protestas y huelgas de hambre, exigiendo al ministro de Educación, Víctor Hugo Cárdenas, las condiciones para que todos los estudiantes de Bolivia puedan acceder a la educación virtual.
Por su parte el ministro Cárdenas, ha anunciado que desde el 20 de julio se debe retomar las clases de manera virtual, y que los estudiantes del área rural del país, lo podrán hacer a través de los medios estatales, como radios y televisión nacional, y que incluso enviará brigadas de educación. Agencias