Hubo un tiempo en el que Dani Alves era sinónimo de gloria en el FC Barcelona. Con la elástica azulgrana, el lateral brasileño escribió páginas inolvidables en la historia del club, contribuyendo con su talento y entrega a la conquista de innumerables títulos. Tres Champions League, seis Ligas, cuatro Copas del Rey y otros trofeos adornaban su vitrina, mientras su nombre resonaba en los corazones de los aficionados culés en todo el mundo. Sin embargo, esos días de triunfo y celebración ahora parecen un recuerdo lejano, difuminado por la sombra de la controversia y el escándalo.
Según reportan varios medios catalanes este martes, el Barcelona ha tomado la decisión extraordinaria de retirar a Dani Alves el estatus de leyenda del club, una distinción reservada para unos pocos elegidos que han dejado una huella indeleble en la institución blaugrana en sus más de 120 años de historia.
La razón detrás de esta drástica medida es la reciente condena de Dani Alves por un delito de violación sexual. Aunque el club mantuvo la presunción de inocencia del exjugador brasileño durante el proceso legal, la declaración de culpabilidad el pasado 22 de febrero marcó un punto de inflexión irrevocable en esta trágica novela.
Los detalles de la sentencia son desgarradores. Dani Alves enfrentará una pena de cárcel de cuatro años y seis meses, acompañada de una orden de alejamiento de la víctima por nueve años y seis meses. Además, se le ha impuesto una indemnización de 150.000 euros por el daño moral infligido y las lesiones sufridas.
Pero las repercusiones de esta condena van más allá del castigo impuesto por la ley. La sentencia también dicta una libertad vigilada por cinco años, una inhabilitación especial para el ejercicio de empleos relacionados con menores de edad por el mismo período de tiempo, una multa económica y el pago de las costas procesales. Para alguien que alguna vez fue adorado por millones de aficionados, este giro de los acontecimientos es un golpe devastador.
Para el FC Barcelona y su afición, este capítulo oscuro deja una cicatriz profunda. Dani Alves, quien una vez fue reverenciado como un héroe, ahora queda marcado por una tragedia personal que ha empañado su legado y ha sacudido los cimientos de la institución culé. Agencia