Tras las intensas lluvias, el caudal de la laguna Alalay mejoró y alberga 13 nuevas especies de aves migratorias provenientes de Canadá y de Norteamérica.
El dato fue confirmado por el investigador y biólogo José Balderrama, quien inspeccionó ayer con las autoridades municipales el humedal.
Sin embargo, el biólogo Erick Martínez alertó que el dragado no se completó, una situación que en época de lluvias provocará que los lixiviados de los lodos contaminados, que se encuentran alrededor de la laguna, ingresen nuevamente al vaso de agua y lo contaminen.
Advirtió que estas condiciones provocarán que en uno a tres años nuevamente la laguna desprenda olores y cambie de color del agua.
“Hemos solicitado a la Alcaldía que nos informen si se completará el dragado, cuánto de almacenamiento tiene ahora, debido a que se redujo el embalse. Hay muchas dudas y los efectos de este trabajo incompleto se verá después”, señaló.
La laguna recibe agua de cuatro fuentes: del canal de riego Nº 1, del río Rocha, de las escorrentías y de la serranía de San Pedro, que llevó a almacenar de uno a cuatro metros de profundidad de acuerdo al sector, según el director de Medio Ambiente, Elvis Gutiérrez.