La venida de Boca Juniors a Bolivia y sobre todo a los 4.009 msnm de la Villa Imperial, para medirse el miércoles contra Nacional Potosí (20:00), ha originado una previa con mucho ruido dado el temor que suelen tener los equipos argentinos al momento de subir a la altura. Para este choque el DT Diego Martínez confirmó que llegará a Bolivia el martes, con juveniles y con suplentes para encarar este partido por el grupo D de la Copa Sudamericana.
La logística preparada establece que viajan desde Buenos Aires directo a Sucre, donde se alojarán en dos hoteles ya que existe una gran demanda por los Juegos Bolivarianos de la Juventud que se desarrollarán en la capital del 5 al 14 de este mes. Y además, se habló de viajar a Potosí en camionetas para que la trayectoria sea rápida -el mismo día del partido- y directo al estadio Víctor Agustín Ugarte. En Boca saben que su rival no solo es Nacional Potosí. Agencias