Boca Juniors consiguió algo de alivio en medio de su crisis y derrotó la noche del sábado al modesto Olimpo de Bahía Blanca (tercera división) por 2-1, en su debut en la Copa Argentina.
Agustín Sandez (35) y Darío Benedetto (78, de penal) anotaron los goles para la victoria de Boca, que consiguió un triunfo de rutina, sin brillo, pero ajustado de acuerdo con las lógicas diferencias entre el Xeneize y un adversario que juega en el Torneo Federal A, en la tercera categoría del fútbol argentino.
Nadir Hadad (89) señaló el descuento para el Aurinegro de Bahía Blanca, que en varios tramos del cotejo lo incomodó a Boca y le plantó cara a un rival de renombre durante el partido disputado en Resistencia, provincia de Chaco (940 km al norte).
La victoria también le trajo un respiro al entrenador Hugo Ibarra, muy cuestionado por el bajo rendimiento individual y colectivo en los últimos partidos de la Liga Profesional, en la que Boca sólo sumó uno de los últimos nueve puntos en liza, y retrocedió a la mitad de la tabla, a 7 unidades del puntero y archirrival River Plate.
Para este encuentro, Ibarra dispuso una formación alternativa, con varios cambios, entre motivos tácticos y otros obligados, ya que por la ventana internacional de la FIFA no contó con el peruano Luis Advíncula ni con el armenio Norberto Briasco, ambos afectados a sus selecciones.
Por otra parte, Ibarra dejó en la banca de suplentes a los colombianos Frank Fabra y Sebastián Villa, y al paraguayo Oscar Romero, y de los tres el único que ingresó fue Villa, en la segunda mitad.
En la próxima etapa, Boca se enfrentará con el ganador del cruce entre Barracas Central y Estudiantes de Buenos Aires. Agencias