El boicot religioso y la desinformación frenan el proceso de vacunación en áreas rurales o alejadas de seis regiones: Pando, Potosí, Chuquisaca, Beni, La Paz y Santa Cruz. En este último departamento las autoridades locales reportaron que, por la poca demanda de las dosis en esas zonas, muchas personas se trasladan desde las urbes para acceder a una inmunización.
En Pando, las autoridades reportan problemas en el avance del plan de vacunación en las comunidades de las áreas rurales, aseguró el director del Sedes, Danny Mendoza.
Esta situación se repite en Potosí, donde las autoridades reportaron índices bajos de vacunación por la desinformación, en especial en el área rural. Sebastián Felipe Gabriel, kuraj mallku del norte de esta región, minimizó la gravedad de la pandemia.
En Chuquisaca, Jhonny Camacho, el jefe de epidemiología del Sedes, dijo que hay muy poca demanda de las dosis e indicó que algunas personas del área rural tienen miedo a la vacunación, en especial a las de AstraZeneca.
El otro factor que frena el proceso de inmunización está relacionado a fanáticos religiosos y grupos antivacunas. En Beni, algunos cultos religiosos creen que la vacuna contra la Covid-19 es la marca del diablo, denunció la asambleísta departamental por Riberalta Claribel Sandoval. “Pudimos percibir que se conjeturó una fantasía en torno a la vacuna contra la Covid-19, por ejemplo, dicen que es ‘la marca de la bestia”, aseguró.
En El Alto, la vacunación va a paso lento, el secretario ejecutivo de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve), Daniel Tenorio, explicó que efectivamente él y los vecinos observaron a muchos grupos de fanáticos religiosos que van desinformando a la población sobre las vacunas.