“Fuera, Farías” y “vende humo”, fueron las frases que más se escucharon en el estadio Hernando Siles. Los aficionados que se encontraron con la delegación de la Verde en Miraflores y en el aeropuerto también mostraron su disconformidad. Cuando el partido terminó 3-2 a favor de los chilenos, el grito “¡Fuera, Farías!” fue común en todo el estadio.
“Todos estábamos muy ilusionados, estamos dolidos y golpeados por la forma en la que perdimos. No se dieron las cosas como queríamos”, expresó Ramiro Vaca, quien habló cerca al hotel de concentración y después de que el bus que trasladó a la Verde fue despedido entre proyectiles. El goleador Marcelo Martins fue una de las víctimas. Fue agredido por un grupo de hinchas que gritaba “vende humo” y lanzaba objetos. Uno de esos elementos se estrelló contra el delantero. La Policía gasificó al público.
El panorama fue similar en el aeropuerto de El Alto, donde llegó el seleccionador Farías y un grupo de futbolistas. El DT y los deportistas transitaron por la terminal aérea en medio de insultos. Se informó de un incidente en el pre-embarque.
Lluvia, baldes y vergüenza por el campo de juego
Con baldes y recipientes pequeños. Así se intentó sacar el agua del campo de juego del estadio Hernando Siles antes del partido Bolivia-Chile, por la Eliminatoria. Una intensa lluvia y granizo pusieron en evidencia el drenaje escenario deportivo.
Los trabajadores del Servicio Departamental de Deportes utilizaron “lo que podían” para habilitar el campo de juego. El partido entre Bolivia y Chile se retrasó por 30 minutos. Los personeros de la Conmebol tomaron nota de las quejas de la delegación chilena que intentó trabajar en la cancha antes del encuentro. La administración del estadio Siles se vio en apuros. Medios chilenos criticaron el estado del terreno de juego por sus malas condiciones. La semana pasada, el arquero Carlos Lampe reclamó por las condiciones del campo de juego y los funcionarios explicaron que el escenario estaba en mantenimiento. Agencias