La estatal Yacimientos Petroleros Fiscales Bolivianos (YPFB) solicitó a su par Integración Energética Argentina (Ieasa) que le anticipe el pago por la venta de gas natural de julio, monto que alcanza a unos cien millones de dólares.
La factura prepago que mandaron las autoridades de energía de Bolivia fue motivada en que Argentina cayó en default o incumplimiento contractual al no declarar una garantía, en este caso del Banco Nación, según reporte del diario El Cronista.
Se explica que el default de este contrato no implica riesgos para el abastecimiento de gas en Argentina, aunque es un nuevo síntoma de la interna oficial en el sector de la energía que ya suma varios capítulos.
Argentina tenía que enviar antes del 1 de enero de 2020 una carta de crédito (stand-by letter of credit, SBLC o SLOC) para garantizar el cumplimiento de las obligaciones contractuales que unen a la Ieasa con YPFB hasta 2026 y que en la actualidad están regidas por la cuarta adenda, firmada en febrero de 2019 por el exsecretario de Energía, Gustavo Lopetegui, y el exministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez (MAS).
Desde enero 2020 que Bolivia intenta establecer la cantidad de gas que envía cada día a Argentina. El expresidente de YPFB, Herland Soliz, explicó que se busca negociar un volumen estable de envío de gas una vez que concluya el contrato de venta hacia ese país, uno de los principales mercados de gas de Bolivia.
“Hoy en día tenemos con Argentina una adenda ya firmada en las cuales los volúmenes de exportación en invierno son entre 16 y 18 millones de metros cúbicos día y verano entre 10 y 11 millones de metros cúbicos día (…), entre ambas cifras hay un largo rango de tiempo y volumen, y lo que queremos es acortar este rango y tener un volumen más estable”, dijo a principios de año.
La carta de crédito anterior había vencido el 31 de diciembre de 2019 y el Banco Nación debía renovar la garantía a favor de YPFB para todo 2020, algo que todavía no sucedió. De acuerdo con el reporte de El Cronista, no fue la primera vez que las autoridades de Bolivia mandaron una factura prepago a Argentina para que se le adelante el pago de los 18 millones de metros cúbicos por día (MMmcd) de gas natural.
El reporte indica que hay malestar interno en los funcionarios argentinos, porque creen que el Banco Nación debía enviar “un simple papelito” que se demoró hasta el momento seis meses.
Además, la carta de YPFB llega en un momento de tensión bilateral política por las diferencias (ideológicas o políticas) entre los gobiernos de Alberto Fernández y de Jeanine Añez. En el medio de esta situación se negocia la quinta adenda al contrato que debería tener vigencia a partir de 2021.
El subgerente de Hidrocarburos Juan José Carbajales, en una videoconferencia con EconoJournal, confirmó que las autoridades de energía de Argentina ya estaban en conversaciones con sus pares bolivianos para fijar los nuevos volúmenes y precios de la exportación de gas en los próximos años.
Un vocero del Banco Nación confirmó la información y señaló que “hay un proceso de negociación con los ministerios de Economía y Desarrollo Productivos para renovar la garantía (…). Hay que presentar avales y revisar los balances. Faltaban algunas cuestiones antes de otorgar la nueva garantía”.
Las autoridades de Integración Energética Argentina manifestaron que este tema era una prioridad para resolver con urgencia.
El contrato original fue firmado por los expresidentes Néstor Kirchner y Evo Morales en 2006 y empezó a correr en 2007. Tendrá una duración total de 20 años. Con la reciente adenda, Argentina ahorraría unos 454 millones de dólares (227 millones de dólares por año) por los cambios contractuales.
Una novedosa cláusula fue que se enviaría un avión militar Pampa III, valuado en casi 15 millones de dólares, si Bolivia sobrecumplía en 15 MMmcd los envíos de gas entre el 15 de mayo y el 15 de septiembre de 2019, algo que efectivamente sucedió.
Sin embargo, Argentina todavía no entregó ese avión militar, primero por la negativa de Israel, país que fabrica la aviónica del Pampa III, y , luego por el cambio de gobierno en Bolivia, que Argentina considera que fue mediante un golpe de Estado y no reconoce la autoridad de Añez. Agencias