«¿Para qué viajar a Catar, si en Bolivia tenemos nuestra propia Copa del Mundo en Potosí?», dicen los usuarios en redes sociales. Uno de los atractivos turísticos más llamativos de Potosí se ha viralizado y se trata del Valle de las Rocas de Atocha, con sus formaciones rocosas. El comparativo entre la roca de Potosí y el trofeo del Mundial Catar 2022 viene como «anillo al dedo» y es que los usuarios en redes sociales compararon la semejanza entre ambos y las siluetas «lo delatan».
¿Ya conoces la «Copa del Mundo» de Bolivia? Estas formaciones rocosas están ubicada en Atocha, que queda a unas 4 horas y media de Potosí, el Valle de las Rocas, es un reconocido atractivo turístico que capta la atención por un magnetismo que atrapa. El Valle de las Rocas de Atocha tiene geoformas que están forjadas por la erosión del viento y tiene formaciones de piedra, poco usuales, entre las que destaca “La Copa del Mundo” de Bolivia, bautizada así en redes sociales por los usuarios.
Esta formación tiene unos 10 metros de alto, su base rocosa se asemeja al soporte que tiene el trofeo y la podrás ubicar, cerca de la comunidad de Falsuri, en la provincia Sud Chichas del departamento de Potosí. Los turistas y visitantes, han logrado identificar entre las formaciones rocosas del Valle de las Rocas, un cóndor, un sapo, un pingüino, un león y una «cenicienta», sí, como la de las caricaturas. Ahora visualizan a la «Copa del Mundo».
A este fenómeno psicológico se le reconoce como pareidolia, es un sentido patológico, de los humanos, quienes al encontrar formas en las rocas, nubes u objetos, el cerebro interpreta las formas abstractas en imágenes aleatorias con patrones reconocidos. Sin embargo, los más regionalistas, aceptan esta «similitud» como una bendición de la naturaleza y del fenómeno natural de la erosión.
Atocha se encuentra a 4 horas y media de la Villa Imperial, donde se encuentra la estación de trenes más antigua de Bolivia, en un lugar místico donde se observa formaciones geomorfas, atractivas para los visitantes que aprecian el arte de la naturaleza, y es donde se encuentra la famosa «Copa del Mundo» y otras formaciones rocosas impresionantes.
Posee un gran reservorio de huellas de varias especies de dinosaurio; también se puede visitar el pueblo colonial abandonado “La Atocha Vieja” donde descanso una noche el Mcal. Antonio José de Sucre de camino al puerto de Cobija y escribió su última carta antes de abandonar territorio boliviano, y seguiría hacia Guayaquil, el 12 de agosto de 1828. Agencias
Como agradecimiento a su hospitalidad obsequio un flamin al Sr. De Burgos y se lo conserva en la vestimenta del Santo patrono de La Vieja Atocha.