Una Mona Lisa vestida con la elegancia de las cholitas bolivianas y una versión de la Venus de Botticelli con rasgos indígenas son algunas de las creaciones de la incansable aymara Claudia Callizaya, una admiradora del realismo renacentista que combinó la maternidad y el trabajo en el campo para estudiar artes plásticas.
Cuando conoció el afamado cuadro de la Mona Lisa, se planteó hacer su propia versión, pero representarla como una cholita. Es decir, con el tradicional sombrero bombín, la manta, la blusa y el cabello recogido en dos largas trenzas, además de las elegantes joyas que suelen llevar estas mujeres aimaras.