Brasil anunció ayer que el acuerdo por el que contará con la tecnología para producir la vacuna contra el coronavirus, que es experimentada por la Universidad de Oxford, y la capacidad de sus laboratorios, le permitirán convertirse en el abastecedor del inmunizante para toda América Latina.
La Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), el mayor centro de investigación médica de Latinoamérica y vinculado al Ministerio de Salud, será la responsable por la producción de la vacuna en Brasil en caso de que los experimentos demuestren su eficacia y su seguridad.
Gracias al convenio con la Universidad de Oxford y con la farmacéutica AstraZeneca, Brasil contará con 100 millones de dosis de la vacuna en desarrollo y, gracias a la transferencia de tecnología, estará habilitado a producirla en el país con autonomía.
El acuerdo compromete a Brasil con un desembolso de 288 millones de dólares y primero fabricará un lote de 30 millones de dosis de una vacuna que, aunque prometedora, aún está en su tercera fase de pruebas clínicas (con humanos).
La vacuna, en la que Oxford trabaja junto con AstraZeneca y que es probada en Brasil, figura entre las más prometedoras de las decenas que están experimentando investigadores de todo el mundo.
El secretario ejecutivo del Ministerio de Salud, Elcio Franco, dijo que el acuerdo le daría a Brasil una ventaja si la vacuna resulta efectiva y segura. “La transferencia de esta tecnología nos dará autonomía de producción”, señaló en conferencia de prensa.
“En caso de que la vacuna se muestre eficaz, y gracias a que somos la referencia en la región y a que contamos con una gran capacidad productiva, el acuerdo nos permite convertirnos en el responsable por el abastecimiento de la vacuna en América Latina”, afirmó la presidenta de la Fiocruz, Nísia Trindade Lima, citada en un comunicado de la entidad.
Capacidad de producción
La funcionaria dijo que Fiocruz, que es responsable por el desarrollo y la producción de la mayoría de las vacunas de Brasil, tiene en este momento una capacidad para fabricar hasta 40 millones de dosis de la vacuna al mes sin afectar ninguna de sus otras líneas de producción.
Esa capacidad le permite abastecer no sólo a Brasil, sino también a la mayoría de sus vecinos. Para ello, agregó Trindade Lima, Fiocruz tan sólo necesita de una inversión en sus laboratorios ya prevista en el acuerdo y un posible aumento de la productividad.
En una primera fase del acuerdo con Oxford, Brasil pagará 127 millones de dólares por 30,4 millones de dosis de la vacuna que recibirá en dos lotes, uno en diciembre de 2020 y otro hasta el 15 de enero de 2021.
El país inicialmente importará toda la materia prima producida por los laboratorios de AstraZeneca en el exterior y producirá las vacunas en los laboratorios de la Fiocruz en Río de Janeiro.
En una segunda etapa, y en caso de que se compruebe la seguridad y la eficacia de la vacuna, la Fiocruz podrá comenzar a producir el principio activo en el país. El Ministerio pagará 161 millones de dólares por los derechos para producir otros 70 millones de dosis de una vacuna que tendrá un costo de producción de 2,30 dólares por unidad.