Un impactante hecho conmovió a los ciudadanos de Barcelona, España, al enterarse que finalmente se entregó Albert Cavallé, apodado como “el estafador del amor” y acusado de engañar a más de 20 mujeres para robarles dinero.
Cavallé estuvo prófugo durante seis meses hasta este, ya que se presentó al centro penitenciario de Lledoners. Allí asistió junto a su abogado, David Sans, quien lo ha defendido en los últimos años en más de 20 causas judiciales.
El modus operandi del joven español consistía en entablar relaciones con distintas mujeres a través de aplicaciones para citas como Tinder y Badoo. En aquellas conversaciones, se hacía pasar por abogado, cirujano o inversor para fingir que tenía una economía sólida y estable. Incluso, llegó a mentir que era el hijo del propietario de una famosa clínica en la ciudad.
Una vez que lograba generar confianza con las chicas a las cuales les hablaba, les hacía creer que tenía cuentas bancarias en Panamá. En ese momento, se había desatado el escándalo de “Los papeles de Panamá”, conflicto en el cual grandes cantidades de dinero habían quedado bloqueadas en ese país. A partir de ello, las convencía de que él era uno de los afectados y que necesitaba plata en efectivo para que le desbloqueen las cuentas.
Su primera acusación fue hace siete años cuando su primera víctima lo denunció, a ella se le sumaron más de veinte mujeres que reclamaban lo mismo. Según declaró Sans en diálogo con El Mundo, Cavallé estuvo prófugo durante seis meses “en un paradero desconocido” y desconoce dónde ha estado escondido durante ese tiempo.
Hoy, “el estafador del amor” comenzó a cumplir una condena de dos años y tres meses que se le había dictado por engañar a una mujer y pedirle 850 euros entre 2016 y 2017. Sin embargo, de acuerdo a su abogado, tendrá que seguir pagando sus crímenes.
“Albert Cavallé tiene, aparte de esta pena de dos años y tres meses, tiene otras dos o tres condenas firmes que de un momento a otro se sumarán a esta primera. Y, aparte de eso, tiene varios procesos penales en distintas fases procesales, más o menos, avanzadas. Algunas aún están en fase de instrucción, y otras pendientes de juicio”, concluyó. Agencias