La zona de la Cancha se vio llena de compradores que más que buscar alimentos buscaban material para manualidades y juegos.
Este sábado después de más de dos meses los mercados abrieron y se vio una normal circulación en el centro de la ciudad, pues las autoridades decidieron dar la opción de la población de abastecerse antes de ingresar a dos semanas de la cuarentena rígida.
Mientras las caseritas que venden fruta y verdura mostraban sus mejores productos para ser comercializados, la mayoría de los compradores prefería ir en busca de otros productos que no son considerados de primera necesidad.
“No quiero aburrirme estos días en mi casa”, comentó doña Vicky, mientras hacía fila para ser atendida en un puesto de venta de lana. Lo llamativo es que para comprar este producto se veía una fila de media cuadra. Coincidiendo todas las señoras que esperaban su turno, que aprovecharían la nueva cuarentena para hacer chompas o chalinas para este invierno.
Otro lugar que se vio abarrotado fue el de telas, pues muchas personas están optando por dejar salir su creatividad en los días de confinamiento.
Los sectores de venta de computadoras y aparatos electrónicos también estuvieron llenos, pues según los vendedores, con el retorno al tele trabajo provocó una nueva oleada de compra de celulares, laptops y computadoras de mesa.
“No está lleno como pensaba, pero hay que agradecer que hay venta (…) Espero que mañana esté mejor”, declaró don Javier, mientras acomodaba sus cargas de papa.
Pese a esta situación y la ironía de la preferencia de los compradores, la presencia de los comerciantes ambulantes se aumentó, aunque la mayoría de ellos optaron por vender alcohol, lavandina y barbijos. Aunque otros también sacaron juegos de mesa para la venta.
“La anterior cuarentena se vendía bien. Creo que todos se aburren de ver solo tele”, comentó una caserita que vendía monopolio, en todas sus versiones, y cuadernos para que los niños coloreen.