Una mujer de 31 años, fue brutalmente golpeada por su pareja, quien la pateó sin compasión hasta fracturarle una pierna y el dedo de una mano, la víctima está hospitalizada y el agresor fue aprehendido acusado por lesiones graves.
Dalia vive junto a su hija de 13 años en una habitación que le prestaron para que atienda un parqueo de vehículos en el centro de la ciudad. La tarde del 6 de agosto, Gonzalo M., pareja de la mujer, llegó con un amigo y un primo al estacionamiento y le dijo que tenían que asistir al cumpleaños de un sobrino en Tiquipaya y debía cerrar el parqueo para acompañarlos.
Ella le explicó que no podía ir porque acordó con los dueños abrir el estacionamiento en feriado. Entró un cliente a cotizar el servicio y luego el agresor la celó, cerró la puerta del negocio, la acusó de hacer lo que le daba la gana y empezó a golpearla con puñetes y patadas, mientras ella gritaba, hasta dejarla tendida en el piso. Luego se le acercó para quitarle el anillo de oro que tenía Dalia en un dedo y se lo fracturó para quitárselo.

Dalia se arrastró hasta su cocina para alcanzar su teléfono celular y pidió auxilio a los dueños del parqueo. Ellos vinieron de inmediato, le preguntaron a Gonzalo si había agredido a la mujer y él lo admitió.
Los médicos traumatólogos dijeron que Dalia debe ser operada para ponerle una placa y tornillos en la tibia, hueso de la pierna derecha, para que pueda sanar. Estos insumos médicos tienen un alto costo. Dalia no tiene padres, sus hermanas son madres solas y no tienen cómo ayudarla.
No sería la primera vez que el hombre la agrede, en noviembre de 2022, la golpeó hasta que perdió a su bebé. La familia de él pagó los gastos médicos para que ella retirara la denuncia. La familia de la víctima recordó que ella fue agredida al menos cuatro veces, de las cuales denunció dos y esta es la tercera.
El agresor fue llevado ante un juez que determinó enviarlo por cuatro meses a la cárcel de San Antonio con detención preventiva.