Todo ocurrió cuando una fan del público le obsequió un perrito chihuahua a la artista. El animalito fue pasado de mano en mano hasta llegar a los brazos de Yailin, quien, encantada con el gesto, lo levantó con ternura e intentó darle un beso en la cabeza.
Pero el chihuahua no estaba de humor y reaccionó con una pequeña mordida directa al rostro de la cantante. El público se quedó en silencio por un segundo, hasta que Yailin, con una sonrisa nerviosa, se cubrió la cara y simplemente sonrió. A pesar del mordisco, que no pasó a mayores, la artista continuó su show con total profesionalismo. Su actitud fue ampliamente elogiada en redes sociales.