La mañana del martes se llevó a cabo la audiencia del Choco Burguer, donde las autoridades competentes ratificaron la detención domiciliaria por el delito de feminicidio, a pesar de existir una condena de 30 años contra Feliz Peña que tendría que cumplirla en el penal de máxima seguridad de “El Abra”.
Ante este accionar de la justicia, la representante de voces Libres, Mercedes Cortez, observó la determinación de las autoridades competentes ya que al estar en libertad prácticamente el choco burguer, sus propias hijas estarían corriendo peligro.
“Los vocales no se pronunciaron respecto a la inseguridad jurídica del proceso. El mismo Tribunal de Sentencia que estableció que la detención preventiva en una cárcel era la mejor opción para Félix Peña cuando solo era un sospechoso, ahora da por bien hecho que otro tribunal que lo suplió en vacaciones le haya dado detención domiciliaria siendo un sentenciado por feminicidio. Esto no tiene sentido. Lamentamos que no exista empatía en el sistema judicial hacia las víctimas. Se priorizan los derechos de los sentenciado. Más allá de ritualismos, debería pesar la verdad material y esa es que Félix Peña mató a su esposa y, como consecuencia, hay 4 huérfanos. Hay mirada sesgada, no se aplica la mirada de género en los casos, tal como los establecen los tratados internacionales a los que Bolivia está suscrita. Es un mal antecedente”, manifestó Mercedes Cortez.
El 29 de octubre de 2020, el Tribunal de Sentencia 1 de Sacaba halló culpable a Félix Peña de haber matado a su esposa, Jhoselin Aguilar Avendaño, el 13 de marzo de 2018. Tras examinar las pruebas periciales, documentales y testificales presentadas, Choko Burguer fue sentenciado a 30 años de cárcel en El Abra.