Cinco formas naturales para calmar las molestias que genera tener tos

Una de las peculiaridades de la tos es que puede llegar a ser tremendamente persistente. Por ejemplo, tras un proceso catarral muchas veces queda una tos irritativa que se comporta de forma similar a la alérgica y que no acaba de desaparecer.

Bebida caliente. – Bebe algo caliente, pero no demasiado se recomienda tomar caldos desgrasados, agua con limón o solo agua. pero calientes, aunque no en exceso. La razón es que beber favorece la salivación y lubrica la garganta. Y si, además, la bebida está algo caliente:

El poder calmante de la cúrcuma.- Si toses continuamente, la garganta se inflama, se irrita y duele. Y es un círculo que se retroalimenta: cuanto más lo haces, mayor es la irritación, con lo que sigues tosiendo aún más. Para ponerle fin, un buen remedio es: Tomar una cucharadita de cúrcuma en polvo disuelta en agua templada o en tus zumos.

Humidificador. -Coloca recipientes con agua (sobre todo en el dormitorio o en el comedor). Estos harán que la mucosidad no sea tan espesa y, al ir expulsándose mejor, se reducirá el reflejo de la tos.

Reduce la irritación con una mezcla de plantas.- Una infusión con una cucharada sopera de la mezcla de caléndula, saúco, manzanilla y tomillo te ayudará a suavizar la irritación de la garganta.

Ten una cebolla bien cerca.- Corta una cebolla por la mitad y déjala en la mesita de noche mientras duermes o cerca tuyo si reposas en el sofá.

Los compuestos de la cebolla que se van liberando después de cortarla, tienen acción antiinflamatoria.