Un estudiante de 14 años perdió la vida luego de permanecer internado cinco días en un hospital, donde fue operado dos veces, pero su pequeño cuerpo no resistió las terribles heridas que tenía tras ser arrollado por un carro cisterna.
El deceso del adolescente fue realmente una tragedia para la zona de Trafalgar, donde conmovidos por su historia, vecinos, maestros y estudiantes salieron en protesta con su cuerpo antes de darle el último adiós.
«Pedimos justicia por el estudiante», «era de nuestro colegio, queremos justicia para nuestro alumno», señalaron sus profesoras.
Se trata de un menor que a su corta edad se hacía cargo de sus hermanitos, luego de que sus padres fallecieran y quedaran huérfanos.
“Era un niño huérfano, el mayor de los cuatro hermanos, él daba sustento a la casa, no por el hecho que era menor de edad, podemos dejar así. Debe haber justicia porque no tiene papa y mamá, él hacía frente a la vida para sostener con un poco de alimento a los chicos, entonces lo que pedimos que no se hagan el desentendido”, aseveró un vecino.
Según explicó el responsable de la Defensoría de la niñez y adolescencia, Fernando Meneces, el accidente ocurrió el pasado 25 de abril.
“Una cisterna al hacer una maniobra de retro fue que aplasto a un menor de 14 años y lastimosamente lo dejo muy malherido (…) este sujeto quien habría recibido medidas sustitutivas”, indicó.
Agregó que se hará seguimiento al proceso contra el conductor del motorizado, ya que ahora la figura cambiaría.