El dirigente cívico cruceño Rómulo Calvo se acogió a su derecho al silencio en la convocatoria fiscal para declarar sobre una denuncia por racismo y otros delitos. Al salir de la audiencia, aseguró que no renunciará y que “tiene lo que ponen las gallinas”, en alusión a las críticas que recibió la noche de ayer y madrugada de hoy de quienes exigen su renuncia.
“No he renunciado, voy a seguir trabajando, voy a seguir dando lo mejor de mí, en ningún momento me falta lo que ponen las gallinas como dicen ellos”, afirmó y aseguró que ahora trabaja en la preparación del paro escalonado de este jueves y viernes en contra de los resultados de las elecciones que dieron como ganador al MAS.
Calvo se declaró rehén la noche de ayer de un grupo de personas que cercó las instalaciones del Comité pro Santa Cruz reclamando que declare un paro indefinido y no escalonado como se había definido inicialmente. Por la madrugada pudo salir y denunció que detrás de los pedidos de renuncia hay intereses políticos y personales.
Este miércoles acudió a la Fiscalía en atención al citatorio que recibió en el marco de la denuncia por racismo, discriminación y otros delitos. La denuncia tiene origen en una declaración de agosto cuando calificó de “bestias humanas” a quienes protestaban por el adelantamiento de las elecciones.
Sin presentar pruebas, Calvo aseguro que hubo irregularidades en las elecciones que dieron como ganador a Luis Arce del MAS. Exige que se suspenda la posesión de Arce, prevista para este domingo, pese a que ninguna misión de observación internacional detectó ninguna irregularidad y no fue observada o anulada ninguna mesa de sufragio. Agencias