Climax es uno de los grupos que mejor representa a la movida cumbiera de Cochabamba, sus 34 años sobre escenarios lo confirman pues desde que nació el 20 de diciembre en 1987 hasta el momento solo ha cosechado aplausos y el cariño de sus seguidores.
Su carrera musical se refleja en los 10 vinilos grabados, cinco CDS y más de 20 producciones individuales. Tuvieron presentaciones en Chile, Argentina, Brasil y Perú, país donde tiene muchos fans.
En un inició eran cinco integrantes y actualmente son seis. Su estilo musical no ha cambiado pues afirmaron que, a través de este es que los conocieron y tuvieron aceptación.
Algunos de los primeros integrantes ya no están presentes; sin embargo, una nueva generación refresca al grupo, entre ellos los hijos de los fundadores.
MUSICA EN FAMILIA
El grupo fue formado por los hermanos Wilson, Miguel y Marco Fernández Yucra, y fue su padre quien cumplió el rol de manager y representante, ya que él también tenía una importante trayectoria musical.
Miguel recordó que cuando eran niños aprendieron a tocar porque los instrumentos de su papá estaban a su disposición y cuando eran aún adolescentes fueron escuchados por su progenitor que quedó sorprendido por el talento de sus hijos. No obstante, les dijo que no se dediquen a la música sino a los estudios.
Los hermanos aún tenían ganas de subir a los escenarios, pese a la recomendación de su papá, por lo que se presentaron ante “Lauro Records” y don Laureano quedó encantando con ellos y les propuso grabar un disco.
Al enterarse de la “buena noticia” su padre hizo un trato con ellos. El disco que graben sería el primero y último; sin embargo, no contaron con que este sería el primer éxito de muchos. “Mi padre nos dijo ustedes son tres: el ritmo lo pone Miguel, el cuerpo Wilson y el corazón Marco tocando el teclado”, expresó Marco.
La nueva generación de los Climax es impulsada por sus padres, pues son jóvenes que saben equilibrar los estudios con la música, a diferencia de sus papás que no pudieron estudiar por los viajes que hacían. “Estábamos desenchufados, porque la música nos absorbía, pero ellos cumplieron con sus obligaciones académicas, supieron conjugar la música y sus profesiones”, dijo Marco.
“CON UN VASO DE CERVEZA”
Climax se caracterizó por ser un grupo juvenil puesto que el mayor de los integrantes tenía 20 años los demás oscilaban entre los 13 y 16. Marco contó a LA VOZ que el primer disco que grabaron tenía 10 canciones de estas había una de relleno que era “Con un vaso de Cerveza”, la cual se convirtió en uno de sus mayores éxitos.
“Era la canción rechazada no queríamos cantarla porque éramos todos menores y decíamos como vamos a cantar ‘con un vaso de cerveza’ , si ninguno de nosotros toma, pero no imaginamos el éxito que tendría” , recordó uno de ellos.
Las primeras canciones que grabaron eran rediciones, porque siendo tan jóvenes aún no componían ya que les faltaba experiencia, no conocían del sufrimiento todo para ellos era felicidad.
“Posteriormente agarramos experiencia y empezamos a componer teníamos letras que han tenido aceptación a nivel nacional, ‘Me enamore’ fue una de ellas”, dijo Miguel.
CLIMAX
El grupo nació con el nombre de los “Cazafantasmas”, porque la película estaba de moda cuando ellos eran adolescentes, incluso tenían poleras con el logo del fantasma. Si bien, ellos que prácticamente eran unos niños se sentían felices con el nombre, este no convenció a su padre, quien los nombró Climax, es decir el punto máximo al que se puede llegar.
Respeto por el grupo
Los hermanos señalaron que ha costado mantener la agrupación, porque a lo largo de los años cambiaron de integrantes y algunos de estos formaron sus grupos con el mismo nombre.
“Hemos tenido malas experiencias, ha sido difícil la restructuración, pero como en la familia teníamos elemento hemos tratado de grabar nuestros temas y crear nuestra música sin perder la esencia del grupo, tenemos talento en la gente joven”, afirmó Miguel.
Actualmente Climax tiene una tarifa mínima por presentación que es de 3 mil dólares; no obstante, la pandemia también ha golpeado al grupo por lo que los contratos no son como antes; sin embargo, por el respeto a su trabajo no tocan por menos. “Se puede vivir de la música hay que respetar a los que están componiendo como a los músicos”, sostuvo Marco.