La Central Obrera Boliviana (COB) entregó ayer el pliego de demandas al presidente Luis Arce donde se propone, entre otras cosas, un incremento del 7% al haber básico y 10% al salario mínimo nacional para esta gestión 2022.
Fue el secretario ejecutivo del ente matriz de los trabajadores, Juan Carlos Huarachi, quien hizo entrega del documento al presidente Luis Arce luego de sostener una reunión donde participaron representantes de diferentes sectores afiliados a la COB.
El dirigente informó que se planteó además que, de manera excepcional para esta gestión, se pueda pagar inversamente proporcional a los trabajadores del país con el objetivo de ayudar a quienes hayan sido afectados durante el denominado “Golpe de Estado” de 2019, la pandemia y aquellos que están reactivando recién sus empresas e industrias en el país.
El presidente Luis Arce informó que el pliego petitorio de la gestión 2022 será analizado y evaluado por las diferentes instancias del Gobierno con “absoluta responsabilidad” para luego llegar a un acuerdo que se tiene previsto ser anunciado el 1 de mayo en ocasión al Día del Trabajador.
El análisis del documento y el pliego será analizado en las comisiones económica, productiva, social, normativo – legal y otras subcomisiones.
El pasado año fue acordado un incremento del 2% al salario mínimo nacional mientras que, en el caso del haber básico, se decidió congelarlo.
Los empresarios consideramos que un alza salarial para el 2022 pondría en riesgo las empresas formales, una de las pocas fuentes de empleo digno que quedan en el país, que también aportan con sus impuestos al desarrollo nacional. En este marco, el sector empresarial pide al Gobierno la sostenibilidad del empleo y para ello abstenerse de disponer un aumento salarial.
Para las MYPES, un aumento salarial provocará el cierre de empresas y consecuentes despidos, quienes se verían obligados a pasar a la informalidad, al precario empleo que tiene el 80 % de los trabajadores del país y que viven del día a día.