Los ganglios linfáticos son pequeñas estructuras en forma de riñón que contienen glóbulos blancos y funcionan como filtros que capturan virus, bacterias y células anormales que son arrastrados por la linfa, una corriente de líquido transparente extracelular. Los ganglios forman parte del sistema inmunitario y se encuentran distribuidos por todo el cuerpo a lo largo de los vasos linfáticos.
En el cuerpo hay de 600 a 700 ganglios linfáticos, que se concentran especialmente en el cuello, debajo de la barbilla, las axilas y la ingle. Podemos tener los ganglios inflamados por varias razones.
¿POR QUÉ SE INFLAMAN?
Los ganglios linfáticos inflamados indican una reacción inmunitaria contra una amenaza, que suele ser un virus o una bacteria. La inflamación de los ganglios en los niños es más frecuente porque su sistema inmunitario es muy eficaz y activo en la producción de anticuerpos.
Un simple resfriado sin complicaciones puede provocar la hinchazón de uno varios ganglios. También pueden inflamar los ganglios una gripe y otras enfermedades infecciosas como el sarampión, la rubéola, la mononucleosis infecciosa o las infecciones bacterianas, entre las que pueden encontrarse las amigdalitis.
Por desgracia, la causa de la inflamación también puede ser una enfermedad crónica o grave, por lo que siempre es necesario un examen médico. En general, cuando la hinchazón se presenta con dolor de garganta, fiebre o mocos, la causa más probable es un virus inofensivo.
Pero si después de tres o cuatro semanas se siguen teniendo los ganglios inflamados y no hay otros síntomas típicos de infección respiratoria, el examen médico es aún más necesario. En cualquier caso, los ganglios no deben tocarse.
REMEDIOS CASEROS
Cuando tenemos los ganglios inflamados por un virus y resultan dolorosos se pueden tratar complementariamente con remedios caseros y naturales.
COMPRESA TIBIA
La Clínica Mayo recomienda la aplicación de una compresa húmeda y tibia o fría sobre la zona afectada. Colócala sin apretar sobre el ganglio durante 5-10 minutos. Puedes realizar la aplicación varias veces al día.
MIEL
Tomar miel (1 1a 3 cucharaditas diarias) puede ayudar a reducir la inflamación, en caso de infecciones que afecten a la garganta y a la boca. Es muy recomendable que la miel sea de producción ecológica para garantizar su pureza y el cuidado del entorno natural.
VINAGRE DE MANZANA
Se puede colocar una empresa empapada en vinagre y escurrida sobre el ganglio inflamado. La aplicación se puede realizar dos veces al día. También es buena idea tomar un par de cucharadas de vinagre ecológico disueltas en un vaso de agua, dos o tres veces al día.
AGUA SALADA
El agua salada ayuda a reducir las congestiones, especialmente en el caso de las infecciones en la garganta y en zonas cercanas a ella. Para beneficiarte de su acción, mezcla media cucharadita de sal con 300 mililitros de agua y haz gárgaras con la solución varias veces al día.
DESCANSAR
Es muy conveniente reducir la actividad y reposar todo lo posible, aumentando incluso las horas de sueño para facilitar el trabajo del sistema inmunitario y superar más rápidamente la enfermedad.
COMER DIENTES DE AJO
Compuestos químicos que se encuentran en el ajo crudo machacado, como la alicina, poseen propiedades antibióticas. Tritura y toma al día 2 o 3 dientes de ajo crudo hasta que desaparezca la infección.
VITAMINA C
Una dosis extra de vitamina C es una ayuda para el sistema inmunitario cuando tiene que hacer frente a una infección y reduce las posibilidades de que se produzcan complicaciones. Lo mejor es tomar la vitamina C a través de un alimento entero, como un kiwi, una naranja o un par de mandarinas.
RAÍZ DE ASTRÁGALO
La raíz de astrágalo ayuda en el tratamiento complementario de los ganglios linfáticos inflamados por una infección viral, como la mononucleosis. Se puede tomar astrágalo en tintura, cápsula o infusión. Sigue las instrucciones del fabricante.