Cómo quitar la tos con 10 remedios caseros

Se recomienda tomar caldos desgrasados, agua con limón o solo agua… pero calientes, pero no en exceso. La razón es que beber favorece la salivación y lubrica la garganta.

PODER DE LA CÚRCUMA

Tomar una cucharadita de cúrcuma en polvo disuelta en agua templada o en tus zumos. Su principio activo, la curcumina, es un potente antiinflamatorio que no solo alivia la garganta, también protege los pulmones de la inflamación que provoca el tabaco o las partículas diésel.

HUMIDIFICADOR

Cuando la tos se genera porque ha quedado un poso de mucosidad, puede mejorar si hay cierta humedad en el ambiente. Utiliza humidificadores o coloca recipientes con agua (sobre todo en el dormitorio o en el comedor). Estos harán que la mucosidad no sea tan espesa y, al ir expulsándose mejor, se reducirá el reflejo de la tos.

MEZCLA DE PLANTAS

Una infusión con una cucharada sopera de la mezcla de caléndula, saúco, manzanilla y tomillo te ayudará a suavizar la irritación de la garganta y, por tanto, a reducir el dolor y la tos. Hierve los ingredientes 5 minutos, deja reposar 10 minutos y cuela. Añade un poco de miel y limón. Realiza gárgaras con la mitad y bebe el resto.

REMEDIO DE CEBOLLA

Córta una cebolla por la mitad y déjala en la mesita de noche mientras duermes o cerca tuyo si reposas en el sofá. Los compuestos volátiles de la cebolla que se van liberando después de cortarla, en especial la quercitina, tienen acción antiinflamatoria y ayudan a reducir la tos.

CÁLMALA CON LLANTÉN

Esta planta es un buen cicatrizante natural que ayuda a reparar las mucosas irritadas. Sus mucílagos también suavizan y reducen la irritación e infamación de la garganta. Prepara una decocción con la planta entera. Puedes beberla o hacer gárgaras (3 veces al día).

GÁRGARAS DE AGUA SALADA

La sal ayuda a reducir la inflamación y, al hacer gárgaras, actuará suavizando el foco del dolor de la tos: la garganta. Mezcla media cucharadita de sal con un vaso de agua templada. Toma pequeños sorbos y haz gárgaras durante 20 segundos.

MIEL EN TUS INFUSIONES

Uno de los mejores remedios para la tos es una bebida templada (agua, leche o infusión) con miel. El beneficio de beber algo caliente ya lo hemos explicado: aumenta la salivación y te reconforta. Además, si endulzas esta bebida con miel la producción de endorfinas aumenta y por tanto, la mitigación del dolor es mayor.

Jengibre contra la tos

Un gran aliado contra los ataques de tos, ya que sus compuestos picantes actúan como relajante muscular, ayudando a controlar los espasmos que causan la tos y aliviando este molesto síntoma. Tómalo en infusión, con miel y limón.

REGALIZ, UN GRAN REMEDIO

Un estudio de la Universidad de Maryland (EE. UU.) avala la eficacia de este remedio tradicional para la tos y el dolor de garganta. La raíz de regaliz posee compuestos bioactivos como el ácido glicírrico que ayuda a relajar el reflejo de la tos y también actúa como expectorante, por lo que es útil si quedan restos de mucosidad.

Prepárala hirviendo una cucharada sopera rasa por cada vaso de agua y tómala de una a tres veces al día, con miel y limón. No conviene exceder la dosis porque puede resultar tóxica y debe evitarse en caso de hipertensión o insuficiencia renal.