Agencias
El Seguro Social de Salud (EsSalud), exhortó a la población a mantenerse alerta frente al avance de la gripe H3N2, tras la confirmación de los primeros casos de influenza A (H3N2) subclado K tanto en Bolivia como en Lima, además de la reciente alerta epidemiológica emitida por el Ministerio de Salud de Perú (Minsa).
Autoridades sanitarias y especialistas advierten sobre el mayor nivel de contagio de esta variante, que circula con más facilidad durante reuniones, viajes y eventos masivos habituales en las fiestas de fin de año.
El especialista de EsSalud, Edwin Neciosup, explicó que el virus presenta características que facilitan el contagio sostenido, por lo que identificar sus síntomas desde las primeras horas es determinante para cortar la cadena de transmisión.
La gripe H3N2 se diferencia del resfriado común porque su inicio es súbito: la persona puede pasar en poco tiempo de un estado de bienestar a un cuadro de malestar intenso.
Los síntomas más frecuentes de la influenza H3N2 incluyen fiebre alta (entre 38 y 40 grados Celsius), dolor muscular generalizado —especialmente en espalda, piernas y brazos—, cefalea intensa, escalofríos, debilidad acentuada y cansancio extremo.
Además, muchos pacientes experimentan tos seca persistente, que puede durar hasta tres semanas, junto con congestión nasal y dolor de garganta.
En ciertos casos, sobre todo en niños, es posible que surjan molestias estomacales o diarreas.
El resfriado común, de acuerdo con el informe, rara vez genera fiebre alta ni obliga al reposo absoluto. Los síntomas suelen limitarse a estornudos, congestión nasal leve y dolor de garganta moderado, permitiendo que las personas mantengan sus actividades cotidianas sin verse forzadas a interrumpir su rutina.
En la gripe H3N2, el agotamiento y la intensidad del malestar dificultan cualquier tarea, aumentando el riesgo de complicaciones en grupos como niños pequeños, adultos mayores, gestantes y personas diagnosticadas con enfermedades crónicas (diabetes, afecciones cardíacas o pulmonares).
VACUNACIÓN Y
PREVENCIÓN
Frente a la propagación de la influenza H3N2, EsSalud recordó que el proceso de vacunación contra la influenza permaneció activo de abril a diciembre, priorizando a niñas y niños menores de cinco años, gestantes, adultos mayores de 60, personas con comorbilidades y personal de salud.
Las autoridades subrayaron que, si una persona ya se vacunó durante el año, no debe recibir una nueva dosis, aunque los especialistas recalcan que la vacuna disponible ayuda a reducir hospitalizaciones y complicaciones, incluso ante el subclado K.
Como parte de las recomendaciones, el llamado es a reforzar hábitos ya conocidos: lavado frecuente de manos, uso de mascarilla cuando se presentan síntomas respiratorios, ventilación adecuada en ambientes cerrados y evitar el contacto cercano con pacientes enfermos.
Estas medidas resultan especialmente importantes en contextos donde la movilidad y las celebraciones familiares aumentan el riesgo de contagio.
