En una sesión extraordinaria cargada de tensión, el Consejo Metropolitano Kanata declaró emergencia ambiental en el eje metropolitano de Cochabamba, tras una grave crisis en la gestión de residuos sólidos.
La reunión, liderada por el gobernador Humberto Sánchez, culminó con la firma de un acta metropolitana que plantea soluciones urgentes, pero no logra aún destrabar los conflictos locales. El documento aprobado por unanimidad por los alcaldes de Cercado, Colcapirhua, Tiquipaya, Quillacollo, Sacaba y la Gobernación incluye cuatro puntos clave:
– Aprobación unánime del proyecto de tratamiento de residuos propuesto por la Asociación de Municipios de Cochabamba (AMDECO), cuya viabilidad será evaluada por un equipo técnico en un plazo de 48 horas.
– Coordinación metropolitana para implementar un proyecto integral de industrialización de residuos sólidos.
– Solicitud al Tribunal Agroambiental para autorizar el ingreso de residuos al relleno sanitario de K’ara K’ara, con el fin de proceder al cierre técnico de las celdas 2 y 3, conforme a la Ley 755.
– Emergencia ambiental en toda la región metropolitana, ante el riesgo a la salud pública por la acumulación de basura.
A pesar del consenso entre autoridades, el conflicto persiste en Colcapirhua. El alcalde Nelson Gallinate anunció que el bloqueo en la avenida Blanco Galindo continuará, como medida de presión ante el intento de trasladar basura del Cercado hacia su municipio.
“El bloqueo se mantiene. No aceptamos la basura del Cercado en Colcapirhua. La población del sindicato Esquilán Grande está en vigilia como manifestación y exigencia de nuestros derechos”, declaró Gallinate, al tiempo de indicar que el recojo de residuos en su municipio se ha paralizado. La falta de una solución inmediata agrava el problema sanitario en la ciudad y mantiene en vilo a los ciudadanos.