Durante toda la semana, los vecinos de los distritos 9 y 5 se movilizaron exigiendo se apruebe el cambio de uso de suelo de los terrenos contiguos a la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, los cuales serían usadas para la construcción de una nueva Terminal de Buses. Pero esta autorización habría sido abrogada por el Concejo Municipal en marzo de este año.
Siendo este el causante de que los vecinos salgan a las calles exigiendo a los concejales “traidores de la zona sur” retractarse, para que esta obra lleve progreso a ese sector.
El dirigente del distrito 9, Gilberto Coyo, aseguró que ese sector fue completamente olvidado por las autoridades, y la construcción de una Terminal no solo generará que se mejoren las calles y avenidas del sector, sino que será un impulso económico de las familias que viven en la zona.
Mientras tanto, un grupo de vecinos, se mantienen en vigilia en la Planta de Tratamiento de Albarrancho, como si fuera una amenaza silenciosa de una posible toma del lugar si no se aprueba esta construcción.
ALCALDÍA VS. CONCEJO
Esta situación puso más tensión en la relación entre el Concejo y el Ejecutivos, pues los primeros culpan al alcalde José María Leyes de tener intereses personales en la construcción de la nueva Terminal, que sería privada y solo beneficiaría a los bolsillos de un sector. Mientras que desde la Alcaldía culpan a los concejales de truncar el progreso del municipio.
“El problema de fondo es que hay 5 concejales que se oponen al desarrollo y modernización de la ciudad, y que están en contra de la nueva construcción de la Terminal”, aseguró el asesor Alex Contreras.
Mientras, que desde el Concejo señalaron que existe un funcionario de la Alcaldía que está convocando a las movilizaciones. Lo cual fue negado rotundamente por el asesor.
El vicepresidente del Concejo, Joel Flores, recalcó que el mismo alcalde Leyes era quien pedía la construcción de una terminal municipal, pero ahora estaría viabilizando este proyecto que es privado.