Varios residentes bolivianos expresaron la jornada de este sábado su protesta en las afueras del Consulado de Bolivia en Madrid, a donde fueron programados para realizar trámites personales y se encontraron con las puertas cerradas.
La modalidad aprobada es que una persona debe recibir una cita indicada por el Consulado para recabar documentos como certificados de nacimientos, cédulas de identidad, certificados de defunción, legalización de documentos, carta poder o cualquier otro trámite.
Bajo este esquema de trabajo, un grupo de bolivianos fue agendado y se trasladó desde Paris, Valencia y otras ciudades de España, pero grande fue la sorpresa al encontrarse con las oficinas cerradas sin ningún aviso que explique el motivo de esa determinación.
Una de las personas perjudicadas logró contactarse con una funcionaria del Consulado quien le explicó vía telefónica que el personal dio positivo a las pruebas de coronavirus.
«Se ha decidido no atender hoy (sábado) por el motivo que varias personas ha caído con Covid y tenemos que estar en nuestras casas guardando cuarentena. Yo esa decisión no la he tomado ¿vale? Yo voy una semana sin ir a la oficina y no sé cuál ha sido el motivo por el cual ellos no les han avisado», explicó la funcionaria.
En su conversación anunció que un compañero llegaría hasta el Consulado para brindar explicaciones. Sin embargo los bolivianos esperaron casi toda la tarde del sábado sin que ningún funcionario se acercara, lo cual aumentó la molestia de los bolivianos que hicieron esfuerzos económicos para trasladarse de una ciudad a otra o de un país a otro.
La funcionaria aconsejó llamar el lunes para re-agendar las citas sin considerar que en este grupo de bolivianos había madres que viajaron con sus hijos para obtener documentos personales.
Las personas exigieron que el Consulado devuelva el costo del traslado porque consideran una «burla total». Aseguraron que la atención consular «cada vez está peor y no puede ser que nos traten peor a unos animales. Merecemos respeto. Hay niños que están acá y no saben el frío que está haciendo. Hay que tener un poco de empatía», dijo la persona perjudicada.
Este grupo de bolivianos se retiró molesto sin información certera de cuándo serían atendidos en sus documentos para trámites personales.