El paraguayo Olimpia eliminó sin lugar al debate al opulento Flamengo, el campeón de la Libertadores que deja el trono muy temprano en medio de una oleada de críticas a su entrenador, el argentino Jorge Sampaoli. El Decano liquidó 3-1 al equipo más cotizado de Sudamérica con las clásicas armas guaraníes: combatividad y cabezazos.
Al Fla se le abrió una crisis que solo podrá saldar en parte en la Copa Brasil, donde juega las semifinales, o más difícil, en el Brasileirao, en el que marcha segundo a 13 puntos del líder Botafogo. El conjunto del experimentado ‘Chiqui’ Arce se topará en cuartos contra otro once carioca, el Fluminense, cuyo orientador Fernando Diniz intenta demostrar porqué se la ha confiado la dirección técnica del Flu y el interinato en la seleçao en forma simultánea.
También entre fuerzas parejas se presagia el clásico argentino entre Racing y Boca. La Academia dejó boquiabierto al fútbol regional rozando el milagro ante Atlético Nacional con un claro triunfo el jueves en casa 3-0 tras caer por un lapidario 4-2 en Medellín en octavos.
El ‘xeneize’, en cambio, llega a cuartos tras una laboriosa llave ante Nacional de Uruguay que definió en la tanda de penales en la Bombonera con un soberbio portero Sergio ‘Chiquito’ Romero, una muralla que contuvo dos disparos y fue clave para la clasificación.
Fuera de ritmo, en deuda con la hinchada boquense quedó el goleador uruguayo Edinson Cavani en su debut con la casaca azul y amarilla, pero a los 36 años mostró que no ha perdido su instinto goleador que exhibió en varias acciones peligrosas en zona de fuego.
Como Deportivo Pereira, Bolívar dio el golpe en octavos, dejó afuera en los penales a Athletico Paranaense, vicecampeón del torneo, y llega aliviado a su cruce en cuartos con Internacional de Brasil. No solo la altura de La Paz (3.600 msnm) le sonríe a Bolívar, también el fútbol sólido que llevó al equipo dirigido por el español Benat San Jose a disputar su primera instancia de cuartos de final en 9 años, en la que enfrentará a un Inter de Porto Alegre.
Inter viene de sortear una complicada llave de octavos frente al poderoso River Plate y ahora el sueño del tercer lauro continental no aparece como un objetivo tan lejano. Agencias