La dirigencia paralela de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) hizo saber que la única manera en que suspendería el bloqueo nacional indefinido de caminos que declaró para el 4 de septiembre sería que el Gobierno atienda su pliego, que entre otras cosas exige la destitución de cinco autoridades, entre ellas dos ministros de Estado.
Eufronio Herrera, el secretario de Justicia de la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Santa Cruz, que forma parte de este bloque, aseguró que el pedido de los campesinos no es que el gobierno reconozca a su principal dirigente nacional, Ponciano Santos, sino que atienda su pliego de demandas presentado la anterior semana, donde se exige además la construcción de “una nueva agenda política y social”.
Dijo que están conscientes de que una medida de presión como esta genera daños económicos al país (el Gobierno calculó una pérdida diaria de 115 millones de dólares), pero aseguró que la protesta es legítima cuando se trata de defender intereses de un sector que consideran fue desatendido en la gestión del presidente Luis Arce Catacora.
“Si acaso el gobierno responde el pliego petitorio que salió de un ampliado, no habría ninguna necesidad de bloquear y perjudicar al país, pero si el gobierno no obedece y no responde al pliego que se ha hecho conocer, lamentablemente el bloqueo se ha decidido, el bloqueo no va a dar marcha atrás, va a comenzar a partir del 4 de septiembre”, anunció en una entrevista en la red DTV.
El pliego, que fue aprobado la semana pasada tras la elección de dos dirigencias en la CSTCB, exige la destitución de los ministros de Gobierno, Eduardo Del Castillo, y de Justicia, Iván Lima. Acusan al primero de haber operado para que se presenten hechos de violencia en el último congreso de la CSUTCB y al titular de Justicia de atacar políticamente al expresidente Evo Morales al anunciar un juicio en su contra.
Además de ellos, exigen la destitución del viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Juan Villca; del director general ejecutivo del Servicio Nacional de Registro y Control de la Comercialización de Minerales y Metales (Senarecom) Mauricio Mamani y del director del Instituto Nacional de Reforma Agraria, Eulogio Núñez.
En el caso del director del INRA, se exige su destitución porque los campesinos consideran que esta autoridad burocratiza el proceso de saneamiento de propiedades agrarias, creando divisionismo.
El pliego incluye otras exigencias, como que el Gobierno de se “abstenga de interferir en los procesos de construcción y conformación” de estas entidades y piden que ningún funcionario emita opiniones o “realice actos” que crean divisiones internas.
Herrera insistió en que la única forma de suspender el bloqueo sería que el gobierno convoque a un diálogo y acepte cumplir las demandas del sector campesino. Mientras, dijo que ya se han diseñado las estrategias para cumplir con el bloqueo.