Luego de varios días de juicio oral, el Tribunal de Sentencia de la capital, ha sentenciado a 12 años de cárcel a Deibi A. S. C. (según iniciales) de 33 años de edad, quien fue encontrado culpable del delito de abuso sexual y robo agravado. Que deberá cumplir en el penal de Morros Blancos.
El hombre de nacionalidad peruana, fue acusado de robo y abuso sexual en contra de dos menores de edad y su madre, en la comunidad de Yesera San Sebastián, de la ciudad de Tarija.
El fiscal del departamento, Wilson Tito, explicó que, se ha presentado las suficientes pruebas para demostrar la culpabilidad del sujeto, “lo que se tiene en primera instancia es que el sujeto que ha sido sentenciado habría llegado hasta el domicilio con una calavera indicando que podían leerles su destino de las víctimas el cual les cobraron 2.000 bolivianos y fue ahí que manifestaron que la menor estaba mal de salud, a lo que les ofrecieron un tónico que ayudaría en el estado de salud”, explicó.
Por su parte Gabriela Ávila, abogada de la Unidad del Servicio Legal Integral Municipal (Slim), explicó que con la “excusa” de efectuar rituales de limpieza espiritual realizó toques impúdicos a dos menores de entre 16 y 12 años de edad y su madre.
De acuerdo a los antecedentes, el sujeto les habría sacado en primera instancia la suma de 2.000 bolivianos indicándoles que como estaban embrujados, él debía realizar varias curas. Sin embargo les pedía la suma de 3.500 bolivianos más, dinero que no pudo ser cubierto por la familia.
Ante esta situación el sujeto decidió quitarle a la familia, algunas pertenencias como teléfono celular, una motosierra y una mochila para fumigar. Sin embargo, ese robo no fue el único delito que cometió, toda vez que argumentando que debía hacer curas, procedió a realizar tocamientos impúdicos a los menores de la familia.
Otro de los sujetos recibió medidas sustitutivas en 2020.