El estudio titulado ‘El rol de la vitamina D en la prevención de la mortalidad por enfermedad de coronavirus’, podría contribuir a comprender este nuevo coronavirus que tomó por sorpresa a todo el mundo, y podría ser importante para evaluar los factores de estilo que podrían influir en la respuesta del cuerpo ante el virus.
Si bien los resultados de la investigación no han sido validados por la comunidad científica, los investigadores buscaron en la información existente datos para catalogar los niveles promedio de vitamina D entre los ciudadanos de 20 países europeos, y luego compararon las cifras con el número de muertes por COVID-19 en cada país.
Con esto se probó que existía una relación entre ambos datos y que los países con mayores niveles de vitamina D registraron una menor cantidad de fallecimientos.
Por lo tanto, los autores del estudio, Petre Cristian Ilie, Simina Stefanescu y Lee Smith, sostienen que “el grupo de población más vulnerable para COVID-19 también es el que tiene el mayor déficit de vitamina D”, además de que estudios anteriores sugieren que tener niveles idóneos de vitamina D pueden disminuir el riesgo de infecciones respiratorias como la gripe.
El papel de la vitamina D y dónde encontrarla
La vitamina D favorece la absorción del calcio, uno de los principales componentes de los huesos.
También ayuda, junto al calcio, a reducir la pérdida de minerales en mujeres posmenopáusicas, y cumple con funciones biológicas en el sistema inmune, metabolismo y en los dientes.
Puedes obtenerla de tres maneras: a través de la piel, alimentos y suplementos.
Nuestra piel produce este macronutriente después de exponernos al sol, pero demasiada exposición a este puede ocasionar envejecimiento de la piel y cáncer de piel, por lo que es preferible obtenerlo de otras fuentes, como los alimentos. Por ejemplo: el hígado de res, los huevos o los pescados azules… Agencias