Perú
Una serie de explosiones sacudió la localidad peruana de Desaguadero, fronteriza con Bolivia, luego de que un depósito clandestino de Gas Licuado de Petróleo (GLP) comenzara a arder. El fuego alcanzó garrafas almacenadas en el lugar y desató un “infierno” que dejó a la población en estado de alarma. Medios peruanos informaron que el depósito era utilizado para acopiar GLP de contrabando, presuntamente de procedencia boliviana. El combustible era utilizado para rellenar cilindros sin ningún protocolo de seguridad, en una práctica completamente ilegal. La emergencia puso en evidencia la precariedad de la localidad peruana: no cuenta con una unidad de bomberos y la Policía no pudo hacer nada para contener el fuego. Denunciaron que la vivienda siniestrada funcionaba como depósito clandestino de gas, y que este hecho representa un grave riesgo para la vida, integridad y bienes de los vecinos.
Agencias.