Al menos 10 niños perdieron la vida a causa del cáncer en los últimos dos meses en el departamento de Cochabamba, denunciaron ayer madres y padres de familia de pacientes del servicio de oncología del Hospital Manuel Ascencio Villarroel.
Los padres llegaron la jornada de ayer, en una marcha de protesta, hasta la plaza principal 14 de septiembre para exigir a las autoridades la licitación inmediata de los medicamentos a la Gobernación de Cochabamba y al Ministerio de Salud.
Los movilizados, indicaron que debido a la falta de medicamentos, se habrían suspendido tratamientos de quimioterapia en los pequeños pacientes.
“Se han suspendido muchas quimioterapias, hemos tenido 10 decesos en los últimos dos meses y nuestra desesperación es tener un niño más que nos abandone, vamos a responsabilizar a las autoridades si es que pasara eso”, dijo una de las madres movilizadas.
Indican que esta situación se repetiría durante varios días por lo que se declararon en emergencia.
CUESTIONAMIENTOS
Exigen a las autoridades de salud agilizar el proceso de licitación de los fármacos debido a que el «cáncer no espera».
Cuestionan que existirían retrasos constantes y que esta situación se arrastra hace varias gestiones.
“Se pasan la pelotita (la Gobernación de Cochabamba y el Servicio Departamental de Salud) uno tras otro. Ellos se han comprometido y dijeron que estaban asegurados los medicamentos para nuestros hijos pero vemos que esto no es así”, reclamó otra madre de familia.
En pasados días, los padres realizaron otras medidas de presión en puertas del servicio de oncología del hospital del niño “Manuel Ascencio Villarroel” en la avenida Oquendo.
Señalan que en muchas ocasiones deben correr con los gastos económicos.
Algunos de los fármacos que necesitan los niños para el tratamiento del cáncer, pueden llegar a costar más de Bs 1.800 y sus hijos requieren de varias medicinas a la semana. A eso se debe sumar otros gastos como la alimentación de los niños y el transporte para que vayan al hospital.