Cuando inició la pandemia de coronavirus en nuestro país, el alcalde José María Leyes mandó a elaborar miles de barbijos de tela que tenían el serigrafiado de “Cochabamba la ciudad de todos”. Estos fueron repartidos a guardias municipales, uniformados e incluso dirigentes de juntas vecinales, para de esta forma cuidar a la población del virus.
Sin embargo, éstos fueron confeccionados en tela delgada y sin ningún tipo de filtro, por lo que no garantiza la bioseguridad de quien lo use, generando una falsa tranquilidad en la población.
Esto fue duramente criticado por el diputado Rodrigo Valdivia, quién desde el pasado mes se le dio por fiscalizar la Alcaldía de Cochabamba e iniciar procesos contra Leyes.
En su perfil de Facebook, Valdivia mediante un video demostró que la tela del barbijo deja pasar las partículas de saliva de un estornudo. Usando un aspersor de un lado, simulando un estornudo, supo en medio de una hoja el barbijo cuestionado, y se pudo evidenciar que la hoja se manchó con el agua rociada por el aspersor, mostrando la mala calidad de la tela.
“Este barbijo no protege de nada (…) es una tentado contra la salud pública”, declaró.