Un terrible accidente doméstico se registró al interior de una vivienda en la zona sur de la ciudad al inicio de este año.
Se trata de un hombre que se disponía a aprovechar el feriado para realizar algunos trabajos en su casa, por lo que acudió a una ferretería para comprar el disco que le faltaba a su amoladora.
Acompañado por su esposa, antes de empezar a trabajar, el hombre trató de probar el equipo sin imaginar que terminaría perdiendo la vida, ya que esta parte del equipo salió disparada hacia su cuello.
“En presencia de su esposa se pone a instalar el cable de electricidad a la amoladora donde coloca también el disco metálico para cortar la madera, cuando realiza la prueba de la amoladora es que el disco sale disparado y va directo al cuello de la víctima donde le realiza varios cortes, los cuales le causan la muerte inmediata por hemorragia”, informó el director de la Fuerza especial de lucha contra el crimen, Cnl. Freddy Medinacelli.
Todo habría ocurrido en cuestión de segundos, ya que por las lesiones que recibió en el cuello la víctima murió en el lugar y no pudieron socorrerlo.
Según el informe de la policía, una vez que los efectivos llegaron al lugar trataron de iniciar con las investigaciones del caso y proceder al levantamiento del cuerpo, pero la familia se opuso.
“Los hijos, los hermanos y demás familiares que se encontraban en el inmueble, se encontraban bajo efectos del alcohol, en estado de ebriedad y no han permitido la intervención policial, razón por la cual se han opuesto rotundamente al levantamiento”, agregó.
Medinacelli lamentó el accionar de la familia y explicó que en casos de muertes violentas es necesaria una investigación según el procedimiento que sigue la policía.
“No es suficiente con conocer a un médico porque yo no conozco a un solo médico que se vaya a animar a certificar esta muerte, como una muerte natural, porque si es muerte violenta no tienen la competencia para certificar este tipo de hechos”, finalizó.